En los últimos días, Guayaquil ha sentido un alivio en el calor característico de la ciudad. Las noches y madrugadas ahora traen un aire más fresco, acompañado de vientos que han llevado a muchos a desempolvar chompas y ropa abrigada. Este cambio, lejos de ser un capricho del clima, responde a una transición estacional confirmada por expertos.
Temperatura actual de Guayaquil bordea entre 23.6 °C y 25.0 °C; las noches son frescas
El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) señala que mayo marca el paso de la época lluviosa a la seca en el litoral ecuatoriano. Este proceso, explica Boris Malavé, técnico del Inamhi, reduce progresivamente la humedad y las temperaturas mínimas, especialmente en la noche. Actualmente, Guayaquil registra temperaturas entre 23.6 °C y 25.0 °C, un descenso notable frente a los picos de meses anteriores, cuando el calor era más intenso. Aunque estas cifras aún reflejan un clima cálido, la tendencia hacia temperaturas más bajas se consolida.
Por otro lado, las lluvias no han desaparecido del todo. El sábado 17 de mayo, una intensa precipitación sorprendió a varios sectores del centro de la ciudad. Según el Inamhi, estas lluvias son normales en esta fase de transición, ya que el ciclo lluvioso no termina abruptamente. Las precipitaciones, aunque menos frecuentes, suelen presentarse en la tarde o noche, manteniendo un patrón climático variable.
En consecuencia, el Inamhi recomienda a los guayaquileños seguir atentos a los boletines oficiales para anticipar cambios climáticos. Mientras tanto, la ciudad se adapta a esta etapa de transición, disfrutando de noches más frescas, pero sin descartar días cálidos o lluvias ocasionales. Este cambio estacional invita a los ciudadanos a prepararse para un clima más seco, aunque aún impredecible.