La impuntualidad de los asambleístas ecuatorianos ya tiene un costo económico significativo. El presidente de la Asamblea Nacional, Niels Olsen, impulsa esta medida para que este poder del Estado sea un ejemplo de disciplina y respeto al tiempo.
Olsen destacó que la Asamblea debe liderar con el ejemplo ante la ciudadanía, ya que los retrasos afectaban el inicio puntual de las sesiones por falta de quórum. “Se los citaba (a los asambleístas) a las 5 de la tarde y eran las 6, una hora de atraso, y no podía arrancar a trabajar”, explicó.
Este retraso perjudicaba no solo a los legisladores, sino también a la prensa y a la ciudadanía que sigue el trabajo parlamentario. Olsen enfatizó que la impuntualidad representa una falta de respeto hacia los colegas y hacia los ciudadanos que esperan un trabajo eficiente y responsable.
Desde que asumió la presidencia, ha promovido una Asamblea más puntual, aplicando sanciones económicas que han demostrado ser efectivas. “Las multas están funcionando”, afirmó.
multas económicas y control a asambleístas ecuatorianos
En lo que va del año 2025, la Asamblea Nacional ha recaudado más de 50 mil dólares en multas por atrasos e inasistencias, sumando montos correspondientes a gestiones anteriores.
Esta cifra refleja un cambio en la cultura legislativa orientado a mejorar la puntualidad y la asistencia. Uno de los principales avances ha sido la implementación de un sistema de registro de asistencia biométrico, que reemplaza el antiguo control manual. Ahora, los asambleístas deben registrar su ingreso con su huella digital al llegar a su curul, lo que garantiza un control más transparente y evita manipulaciones políticas.
Este control biométrico fortalece el compromiso de los legisladores con sus funciones y asegura que el Pleno pueda iniciar las sesiones a la hora establecida. Además, las multas por retrasos ascienden a 55.52 dólares, mientras que las inasistencias injustificadas implican sanciones de 158.63 dólares, descontadas directamente del salario de los asambleístas. La medida busca promover la responsabilidad y la eficiencia en la Asamblea Nacional, reforzando la confianza ciudadana en esta institución.
Asamblea Nacional: compromiso con la transparencia
La Asamblea Nacional avanza hacia una gestión más responsable y transparente, donde la puntualidad y la asistencia se convierten en prioridades.
La combinación de multas económicas y el uso de tecnología biométrica permite un control riguroso que beneficia tanto a los legisladores como a la sociedad.
Niels Olsen ha dejado claro que el Legislativo debe ser un ejemplo para el país.