Los habitantes del barrio Nuevo Manta, en San Juan, están preocupados por el manejo del vertedero municipal, donde se acumulan hasta 1.000 toneladas de basura cuando las operaciones se ven afectadas.
Mónica Rodríguez, moradora, aseguró que tienen un problema bastante delicado con el tema de la basura y las moscas en el vertedero.
Hace unos meses un grupo de moradores de este sector denunció que la basura no estaba siendo enterrada.
“Todavía sigue en el mismo problema, porque supuestamente las máquinas están dañadas”, acotó Rodríguez.
Según Melisa Sornoza, desde la zona alta del barrio, ellos se dan cuenta de que la basura está expuesta a campo abierto en el botadero municipal y no está siendo enterrada o se demoran en hacerlo.
Sus dos hijos de 3 y 7 años se enferman con mucha frecuencia. Diarrea y enfermedades dérmicas son las más comunes, dijo.
Espacio opera bajo normativas del Ministerio de Ambiente
Héctor Bowen, director de Higiene y Salubridad del municipio, explicó las razones detrás de estas irregularidades en el vertedero y las medidas que se toman para mitigarlas.
Según Bowen, el vertedero opera bajo estrictas normativas del Ministerio del Ambiente, utilizando técnicas de soterramiento con materiales y químicos especiales.
Sin embargo, cuando las maquinarias pesadas, como excavadoras de orugas, tractores o palas sufren averías o requieren mantenimiento preventivo, la basura no se entierra de inmediato, acumulándose hasta 300 toneladas diarias.
“En casos extremos, hemos tenido hasta tres días de paralización, lo que significa casi 1.000 toneladas expuestas”, señaló.
El director aclaró que estas interrupciones no son nuevas y suelen resolverse en un máximo de cuatro días, dependiendo de la disponibilidad de repuestos, que en ocasiones deben importarse.
“Cuando corregimos el daño mecánico, las operaciones se normalizan automáticamente”, afirmó, destacando que las máquinas municipales están en buenas condiciones, aunque no están exentas de fallos.
El vertedero, con una extensión de 35 hectáreas, cuenta con tres celdas: una principal, una emergente para situaciones como el invierno, y una para escombros.
Actualmente, todas las máquinas están operativas, tras un reciente retraso de casi cuatro días.
Bowen aseguró que el municipio no enfrenta problemas con las normativas ambientales, ya que las irregularidades se corrigen rápidamente.
Último estudio reveló la vida útil del vertedero municipal
Sobre la capacidad del vertedero, un estudio de hace cuatro años estima que tiene una vida útil de ocho a nueve años, considerando el aumento poblacional y de desechos.
Es decir que aún tiene una vida útil de entre cuatro o cinco años más.
Actualmente, en Manta se generan unas 300 toneladas diarias, una cifra que ha disminuido gracias a la recolección interdiaria, con una reducción de entre 1.000 y 1.100 toneladas mensuales, dijo el funcionario.
Sin embargo, los vecinos del barrio Nuevo Manta exigen soluciones para evitar las molestias causadas por la acumulación de basura.
Dolores Alvia (55), contó que el barrio comprende cuatro calles y alberga a más de 80 familias.
Este sector empezó a poblarse después del terremoto del 2016. Muchas casas son de ladrillo, hay otras mixtas, pero también hay casas de caña.
En la administración del ex alcalde Agustín Intriago los moradores de este barrio recibieron las escrituras de parte del municipio.
Según Alvia, dentro del botadero no están enterrando la basura en las celdas como debe ser. “Los chicos que trabajan allí nos han dicho que se debe al daño de las máquinas”, refirió.
Los moradores acotaron que las brigadas de Salud del distrito solo llegan al sector a entregar abate, pero sobre este tema aún no hacen nada.