Las inundaciones repentinas provocadas por la crecida del río Guadalupe en Texas mantienen en alerta máxima a los servicios de emergencia y rescate. Este sábado 05 de julio del 2025, los equipos continúan buscando supervivientes, en especial a las niñas desaparecidas del campamento cristiano arrasado por la corriente. Las lluvias torrenciales siguen amenazando con nuevos desbordamientos en la región.
El gobernador Greg Abbott confirmó que las lluvias han dejado al menos 27 muertos, entre ellos 18 adultos y nueve niños, en el centro y sur del estado, específicamente en Texas Hill Country. La situación de aproximadamente veinte menores del Campamento Mystic sigue siendo incierta, mientras las autoridades no descartan que la cifra de víctimas pueda aumentar.
Emergencias y evacuaciones en Texas Hill Country
El Servicio Meteorológico de Texas emitió alertas de inundación para casi diez poblaciones, recomendando a más de 100,000 residentes que busquen refugio en terrenos elevados. Al menos 850 personas han sido evacuadas, ocho de ellas con heridas, mientras los arroyos crecen rápidamente en los condados de Burnet, Williamson y Travis.
Las lluvias acumuladas superaron los 30 centímetros en pocas horas, elevando el nivel del río Guadalupe a casi 10 metros, uno de sus registros más altos. Esta crecida súbita ha provocado rescates acuáticos masivos y daños severos en infraestructuras, además de dejar sin electricidad y comunicación a varias zonas.
Impacto en el campamento cristiano y respuesta federal
El campamento de verano para niñas Mystic, ubicado a orillas del río Guadalupe en el condado de Kerr, sufrió el impacto directo de la crecida. De las 750 niñas que participaban, al menos 23 permanecen desaparecidas. Las autoridades mantienen la esperanza de encontrarlas y continúan con las labores de búsqueda.
El presidente Donald Trump calificó la tragedia como «terrible» y aseguró que el gobierno federal enviará apoyo inmediato a Texas. Además, expresó sus condolencias a las familias afectadas y destacó la labor de los socorristas en el terreno. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, se desplazará a la zona para coordinar la ayuda.
La amenaza de nuevas inundaciones y recomendaciones oficiales
Las autoridades insisten en la urgencia de evacuar áreas cercanas al río Guadalupe y sus afluentes. La Policía del condado advirtió que quienes se encuentren en zonas de riesgo deben trasladarse a lugares más altos y evitar desplazamientos innecesarios. La región, conocida como «callejón de las inundaciones repentinas», ha vivido tragedias similares en el pasado, lo que agrava la preocupación actual.
Las lluvias continúan y el Servicio Meteorológico mantiene la alerta naranja, advirtiendo que los niveles del río seguirán subiendo en las próximas horas. La población debe estar preparada para posibles nuevos desbordamientos que podrían agravar la emergencia.
Coordinación y desafíos en el rescate
Los equipos de rescate han evacuado a más de 230 personas, muchas en helicópteros, mientras enfrentan condiciones adversas por la falta de electricidad y comunicaciones en las zonas afectadas. La destrucción de carreteras y viviendas dificulta el acceso, pero los socorristas trabajan sin descanso para salvar vidas y asistir a los damnificados.
El sheriff del condado Kerr, Larry Leitha Jr., calificó la situación como «catastrófica» y advirtió que la cifra de víctimas podría aumentar. El vicegobernador Dan Patrick aclaró que las niñas desaparecidas podrían estar incomunicadas y no necesariamente perdidas, lo que mantiene la esperanza de encontrarlas con vida.
