José «Pepe» Mujica, expresidente de Uruguay, enfrentó múltiples problemas de salud, incluido un cáncer de esófago diagnosticado en abril de 2024, en Montevideo, debido a su edad avanzada y condiciones preexistentes.
Mujica, de 89 años, anunció ese mes en una rueda de prensa que le habían detectado un tumor en el esófago durante un chequeo médico. El diagnóstico se complicó por una enfermedad inmunológica crónica que padece desde hace más de 20 años. Aquello limitaba las opciones como quimioterapia o cirugía. Mujica optó por un tratamiento de radioterapia, completando 32 sesiones entre mayo y junio de 2024.
En agosto de 2024, su médico personal, Raquel Pannone, informó que el tratamiento eliminó el tumor inicial. Sin embargo, Mujica quedó con problemas renales y dificultades para ingerir alimentos debido a una fibrosis esofágica causada por la radiación. Esto llevó a varias internaciones en el sanatorio Casmu, donde fue rehidratado por vía intravenosa.
Complicaciones digestivas y procedimientos quirúrgicos de Mujica
En septiembre de 2024, Mujica fue intervenido quirúrgicamente para colocarle una gastrostomía, un tubo que permite la alimentación directa al estómago, debido a su incapacidad para consumir suficientes líquidos y alimentos por vía oral. Según Pannone, el procedimiento fue exitoso, y Mujica continuó su recuperación en su chacra en Rincón del Cerro, Montevideo, acompañado de su esposa, Lucía Topolansky.
En diciembre de 2024, se le colocó un stent esofágico para corregir el estrechamiento del esófago, facilitando la ingesta oral. La intervención, realizada en el Casmu, mejoró temporalmente su calidad de vida, aunque Mujica reconoció que su recuperación era lenta debido a su edad y falta de energía.
Metástasis y cuidados paliativos
En enero de 2025, Mujica reveló en una entrevista con el semanario Búsqueda que el cáncer se había extendido al hígado, confirmando metástasis. Decidió no someterse a más tratamientos, argumentando que su cuerpo, afectado por dos enfermedades crónicas, no los soportaría. Pannone confirmó que Mujica recibe cuidados paliativos en su chacra, enfocados en mantenerlo sin dolor y con buena alimentación.
El 9 de enero de 2025, Mujica anunció que no daría más entrevistas, pidiendo privacidad para enfrentar esta etapa final. Su ausencia en las elecciones departamentales de mayo de 2025, reportada por el presidente Yamandú Orsi, destacó su delicado estado, siendo la primera vez en 40 años que no participó en un proceso electoral.
Su historial médico incluía una úlcera esofágica previa y torturas sufridas durante 15 años como preso político en la dictadura uruguaya (1973-1985), que afectaron su salud. A pesar de su condición, mantuvo actividad política hasta finales de 2024, apoyando la campaña de Yamandú Orsi.
Mujica, presidente de Uruguay entre 2010 y 2015, se marchó de este mundo este martes 13 de mayo. Lo hizo siendo una figura icónica de la izquierda latinoamericana hasta el último momento.
