Un estudio realizado por el Colegio Americano de Cardiología encontró que la exposición a microplásticos podría estar asociada con un aumento en la prevalencia de enfermedades crónicas no transmisibles, como hipertensión, diabetes y accidentes cerebrovasculares, en comunidades de la costa estadounidense. La relación, aunque significativa, aún requiere más investigaciones para confirmar la causalidad.
Microplásticos y su impacto en la salud
El creciente uso y dispersión de los microplásticos en el medio ambiente ha comenzado a generar preocupaciones sobre sus efectos en la salud humana. Un reciente estudio del Colegio Americano de Cardiología sugiere que estos diminutos fragmentos de plástico, podrían influir en la salud. Los microplásticos están presentes en una amplia gama de productos desde alimentos hasta cosméticos. Estas partículas podrían estar vinculados a un aumento en la prevalencia de enfermedades crónicas no transmisibles. Estas enfermedades incluyen condiciones como hipertensión arterial, diabetes y accidentes cerebrovasculares.
La investigación fue liderada por Sai Rahul Ponnana, científico de datos en la Facultad de Medicina Case Western Reserve. El experto destacó que, al analizar más de 150 factores socioeconómicos y ambientales, no esperaban que los microplásticos estuvieran entre los principales predictores de enfermedades crónicas. Sin embargo, los resultados apuntaron a una correlación significativa.
Un estudio detallado en la costa de EE. UU. con los microplásticos
El estudio se centró en las áreas costeras de Estados Unidos, incluyendo las costas este, oeste y del Golfo de México, entre 2015 y 2019. Los investigadores compararon las concentraciones de microplásticos en las masas de agua con las tasas de prevalencia de enfermedades. Entre ellas la hipertensión, diabetes, accidentes cerebrovasculares y otros problemas de salud en esas zonas. Para ello, se utilizaron datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
A través de un modelo de aprendizaje automático, los científicos evaluaron cómo otros factores socioeconómicos, como el nivel de ingresos o la contaminación atmosférica, se relacionaban con la salud de las comunidades. Los resultados sugieren que la concentración de microplásticos en el ambiente está vinculada a un mayor riesgo de enfermedades, especialmente en las áreas donde la contaminación es más alta.
¿Causalidad o correlación?
A pesar de los hallazgos, los expertos enfatizan que correlación no implica causalidad. Es decir, aunque se ha encontrado una relación entre la exposición a microplásticos y algunas enfermedades, esto no significa necesariamente que los microplásticos sean la causa directa de estas afecciones. El autor principal del estudio, Ponnana, señaló que se requieren más investigaciones para entender mejor esta posible relación causal.
«La exposición a microplásticos podría tener algún efecto en la salud», comentó Ponnana. Sin embargo, subrayó la importancia de reducir el uso de plásticos y mejorar su eliminación para mitigar la exposición, un paso preventivo importante ante los posibles riesgos identificados.
Más investigación es crucial para entender el efecto de los microplásticos
Aunque los resultados iniciales sugieren una posible relación, la falta de evidencia directa sobre la causalidad pone en evidencia la necesidad de más estudios. Los investigadores también sugieren que es necesario determinar no solo si los microplásticos afectan la salud, sino también cuánto tiempo o en qué cantidad de exposición se necesita para que esta relación sea significativa.
El estudio ha abierto la puerta a una conversación más profunda sobre los efectos del plástico en la salud humana, y sobre cómo las políticas públicas pueden ser modificadas para reducir la exposición al plástico, un contaminante ubicuo que ya ha comenzado a preocupar a científicos y expertos en salud en todo el mundo.
(Con datos de Europa Press)