En la calle río de janeiro y avenida sao pablo, más de 16 familias viven sin agua potable y sin alcantarillado. 

El sueño de los moradores de la calle Río de Janeiro es dejar de sufrir por la falta de  agua potable.

Ellos aseguran que para obtener el líquido deben construir pozos.  

La mencionada arteria conecta con la avenida Sao Paulo, en la cooperativa 16 de Marzo.

María Muñoz, habita hace más de 25 años en el pasaje donde termina la calle Río Janeiro.

En el patio de su casa, junto a la piedra de lavar, tiene un pozo.

“A todos quienes vivimos en esta casa nos ha tocado jalar baldes de agua del cubo. Hay días que la lluvia nos salva de realizar todo este esfuerzo”, indica Muñoz.

Pero la falta de agua potable no es el único problema que existe en el sector. Allí también sufren por la ausencia del alcantarillado.  

Gran parte de las viviendas  no cuentan con este sistema, por lo que los vecinos  se ven obligados a lanzar el agua sucia a un estero que cruza por la zona.  

Gloria María Esperanza  Mera Cobeña tiene 77 años de edad, ella compró su casa en este acceso hace más de 18 años.

“No hemos tenido la alegría de recibir mejoras en este sector porque a varios vecinos les falta legalizar sus terrenos, tener las escrituras”, recalcó la mujer.

Gloria asegura que la falta de alcantarillado y agua potable no son las únicas necesidades que tienen en la cooperativa.

“La calle Río de Janeiro está destrozada, en invierno ni  los carros pueden pasar,  peor nosotros. Los huecos y el agua empozada nos impide movilizarnos con normalidad”, detalló la moradora.

Ellos piden atención a las autoridades pertinentes.