Ramón Alexander Álava Lascano estaba celebrando su cumpleaños número 31 cuando llegaron a matarlo.
Sucedió la noche del martes en Piedra Larga. El hombre, al darse cuenta de que lo iban a matar, se subió a su camioneta, pero en ese momento un vehículo se le puso delante, otro detrás y empezaron a dispararle.
Fue una ráfaga de 32 disparos que acabó con la vida de alias “Randy” instantáneamente.
Las balas también alcanzaron a Kevin L., que resultó con una herida de bala en el glúteo y se encuentra estable.
Luego del crimen, los sicarios huyeron en uno de los carros y el otro lo dejaron abandonado en Piedra Larga.
La Policía informó que minutos después, a metros de la vía Circunvalación, cerca del barrio El Porvenir, se reportó el incendio del vehículo en el que supuestamente escaparon los sicarios de “Randy”.
En el lugar los esperaba otro carro, en el que finalmente huyeron los sicarios.
Luis Cano, jefe de la Policía, manifestó que todo indica que a Ramón Álava le tendieron una emboscada para matarlo. “Con el carro que dejaron abandonado, los sicarios le bloquearon el paso y empezaron a dispararle”, dijo Cano.
En la investigación policial se determinó que el vehículo con el que obstruyeron el paso a la víctima está plaqueado, es decir que tiene la placa de otro vehículo que circula en otra ciudad.
En esta misma investigación se maneja la hipótesis de que los sicarios ubicaron a “Randy” por los videos y fotos de la celebración del cumpleaños que fueron subidas a las redes sociales.
La mamá de “Randy” le había dedicado un mensaje en la red social Facebook: “Eres el hombre más importante de mi vida. Eres el principio de mi felicidad. Siempre pediré a Dios que te bendiga y proteja de todo mal”.
El cuerpo de la víctima fue retirado ayer del Centro Forense. El hombre deja en la orfandad a dos niños.
Ramón Álava Lascano registra antecedentes penales desde el 2014 a 2017 por ocultación de cosas robadas, asociación ilícita y otros delitos, informó la Policía.
Agentes de la Unidad de Criminalística recogieron de la escena del crimen 32 casquillos de fusil, que fue el arma que usaron los sicarios para matar a su víctima.
Cano indicó que esta fue una muerte selectiva y los sicarios usaron carros y motos para cometer el asesinato.
Con este crimen, en lo que va de este año en Manta, Montecristi y Jaramijó se registran 141 muertes violentas.