Eduardo Molina, jefe de Cuentas de Mascorona, habló del potencial que tiene Manabí para la exportación, por ejemplo, de frutas.
El ejecutivo habló de la importancia de los acuerdos y de la asociatividad entre productores y la empresa privada para exportar productos no tradicionales.
En los últimos meses se han eliminado partidas arancelarias que benefician a la producción. ¿Qué productos se pueden beneficiar de esto?
Todas estas eliminaciones no están dando cabida no tan solo a ampliar nuestros mercados, sino también para traer tecnología nueva para poder ser más productivos en el campo, sobre todo en los productos no tradicionales. Todos sabemos lo que el país da y produce en el mundo con el banano, camarón, flores y cacao, pero hay productos como las frutas tropicales (granadilla, pitahaya, papaya, piña, entre otras) que tienen mercados de gran crecimiento, pero el país tiene la capacidad de producción no aprovechada para llegar a esos destinos.
Esto es en teoría, pero en la práctica no son aprovechadas. ¿Qué se debe mejorar para exportar estos productos ?
Ver la manera de ampliar estos acuerdos a mayor cantidad de productos, sobre todo en los productos que no se están cubriendo. Algunos de ellos están frenando unos productos, porque no hay acuerdos fitosanitarios.
En Manabí hay reclamos porque no se respeta el precio referencial del producto. ¿Nos resta competitividad?
Es importante tener claro que manejar un precio país nos ayudará a ser más competitivos. Para ello es fundamental que la empresa privada se alinee en el mismo concepto para poder hacer una fuerza país de exportación y no entrar en un regateo de quién te vende un mejor precio, sin importar lo que pueda afectar el resto de la producción. Es un tema de concepto país que hay que afianzarlo en cada uno de los mercados. En Manabí, por ejemplo, las frutas que tienen gran demanda son la maracuyá, la naranjilla y la sandía; productos que se pueden exportar en grandes cantidades al mercado internacional.
¿Cómo hacer que estos productos lleguen a mercados internacionales?
Yo sugiero buscar alianzas con productores y proveedores para que se puedan apalancar con empresas que ya tienen experiencia en el mercado internacional, porque no todo el mundo va a tener la capacidad de exportación desde un principio.
En el año de la pandemia Ecuador tuvo una balanza comercial positiva, incluso se vendieron por primera vez más productos no petroleros. ¿Se podrá hablar en un futuro de vender más productos que petróleo?
Es importante esa referencia, nosotros tuvimos un crecimiento en exportación de agosto del 2019 a agosto del 2020 del 12,8% en productos no tradicionales, y se tiene proyectado que este año creceremos un 5% por ciento más referente al año anterior. Esto dependerá también de que se concreten acuerdos comerciales más fáciles más lo que podamos internamente en crear productos de gran calidad.
Para llegar a eso también se debe tecnificar el agro. En Manabí, por ejemplo, hay muchas deficiencias para el riego.
Si el Gobierno está enfocado en que el Ecuador tenga un crecimiento en la exportación, también debe hacer la inversión interna, aumentar las facilidades en el campo para la industrialización con créditos bajos y a largo plazo, apertura de las importaciones y de la tecnología para mejorar la productividad para llegar a los niveles que debemos alcanzar.