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Este lunes 9 de septiembre, varias cooperativas de transporte de buses urbanos de Guayaquil se unieron a una paralización parcial del servicio. La misma estuvo convocada por la Federación de Transportadores Urbanos del Guayas (Fetug).

La medida causa caos en distintas zonas de la ciudad, donde ciudadanos esperaban por más de una hora para conseguir una unidad de transporte. Incluso, varios recurrieron al servicio de furgonetas que cobraban un dólar por persona.

En puntos clave como la Terminal Terrestre y la Entrada de la Ocho, se reportó la ausencia de buses, informó Ecuavisa . La Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) de Guayaquil confirmó que 32 líneas de buses han dejado de operar.

Mientras que otras 30 líneas, como la línea 89, continúan funcionando. En las calles es evidente la ausencia de gran parte del transporte en una menor congestión del tráfico.

Autoridades de Guayaquil advierten sanciones

Por otro lado, en zonas como Flor de Bastión y el suburbio, líneas como la 114, 49, 21, 7, 44 y 46 no brindaron servicio, lo que dejó a cientos de usuarios sin transporte.

En áreas como la avenida Víctor Emilio Estrada, en Urdesa, también se registró una notable ausencia de buses hacia el centro de Guayaquil.

La Fetug buscaría presionar al Municipio para que incremente el precio del pasaje, actualmente fijado en 30 centavos (35 centavos con aire acondicionado), a 45 centavos. Desde 2021, el gremio de transportistas intenta, sin éxito, que el Cabildo porteño apruebe un incremento tarifario.

Ellos apelan a la difícil situación económica del sector y a los constantes riesgos de inseguridad que enfrentan. En mayo de 2023, semanas después de asumir el cargo, el alcalde Aquiles Álvarez descartó un aumento inmediato en tarifas.

Negativa al incremento del pasaje

Alvarez cita la necesidad de “analizar bien todo en mesas técnicas”. Desde entonces, estas mesas han sesionado durante meses sin llegar a un acuerdo.

Uno de los puntos clave en discusión es la implementación de un sistema de recaudación sin efectivo, similar al utilizado en la Metrovía de Guayaquil. Esto busca mejorar la transparencia y seguridad en el manejo de los ingresos.

Ante la paralización parcial, tanto el alcalde Álvarez como la ATM advierten sanciones a cooperativas que dejen de operar. El burgomaestre se pronunció en sus redes sociales y lanzó dardos a la dirigencia.

“Otra vez el cuento del gallo pelón del señor Christian Sarmiento, el ZAR negativo de los transportistas privados urbanos de Guayaquil”, dijo, al tiempo de asegurar que no cederá a presiones.

Mientras tanto, los usuarios del transporte público en Guayaquil lamentan la falta de unidades y exigen una solución inmediata.