La Policía tiene un enemigo silencioso en sus filas: el suicidio.
Jorge, nombre protegido, es policía, y cuenta que el tema es conocido entre sus compañeros.
De hecho han identificado tres causas de los posibles suicidios: estrés laboral, problemas familiares y económicos.
Jorge dice que el estrés es mayor para los policías que trabajan lejos de las ciudades donde viven sus familias.
“De los tres días libres, al menos uno se va en hacer el viaje, y los dos restantes no compensan un tiempo de calidad con la familia” dice.
Eso desencadena problemas con la pareja, y todo se vuelve peor si los agentes están agobiados por deudas que sobrepasan su capacidad de pago.
Lo lamentable es que solo se llega a saber lo que padece un policía cuando ya es tarde, afirma Jorge.
Así como tarde fue para el cabo José Luis Aguayo Rodríguez, cuya muerte es investigada como suicidio, y ocurrió la tarde del lunes en el comando policial de Portoviejo, mientras laboraba.
Informe sobre casos
En la investigación se reveló que el oficial supuestamente usó su arma, un patrón que se repite en los al menos 39 policías que se quitaron la vida entre el 2010 y 2024, dice un informe policial.
La psicóloga Lisbeth Párraga manifestó que muchos de los agentes se pierden los eventos familiares debido a su trabajo, eso provocaría un quiebre emocional y, si no se encuentra un equilibrio, puede desencadenar en suicidio.
Además, agrega que estudios han demostrado que la tasa de suicidios de hombres es más alta que la de mujeres. “Ellos son más letales al momento de cometer suicidio”, dijo la profesional.
Párraga informó que, en el caso de los hombres, es más complicado que ellos pidan ayuda, ya que aparecen actitudes machistas respaldadas en frases como: “Yo puedo solo”.
Los agentes que trabajan en el distrito de Manta, Montecristi y Jaramijó cuentan con un dispensario médico donde tienen acceso a psicología y otras ramas de la medicina.
En el país existan 65 mil policías.
El Instituto de Estadísticas y Censos (INEC) solo registra datos de suicidios hasta el 2023, año en que ocurrieron mil 109 personas que murieron por esta causa.
Mientras que del 2024 solo hay registros de que el ECU-911 atendió hasta la fecha 407 llamadas telefónicas, entre intentos y suicidios consumados.