Compártelo con tus amigos:

 Los dos militares ecuatorianos que estaban retenidos desde el martes en una comuna al norte de Quito fueron liberados con la asistencia de la Cruz Roja y regresarán con sus familias en las próximas horas.

Así lo dio a conocer este miércoles la ministra de Gobierno (Interior), Alexandra Vela, en declaraciones a los medios, poco después de una rueda de prensa en la que hizo balance de la segunda jornada de protestas que vive el país andino.

“Como consecuencia de un proceso de mediación con Cruz Roja Ecuatoriana y con el consejo de Cruz Roja Internacional acaban de ser entregados a las Fuerzas Armadas los dos militares que fueron secuestrados en la comuna de Pijal el día de ayer”, anunció la ministra.

Y abundó que “serán entregados en pocas horas al seno de sus familias de donde nunca debieron salir”, por lo que es “un momento de alegría para todos nosotros”.

Los dos militares fueron capturados el martes en la provincia de Imbabura cuando, según el Gobierno, realizaban “actividades logísticas” vestidos de “civil”, y dentro de la aplicación del derecho indígena como consecuencia del estado de protesta decretado por sus líderes.

Retener a militares y policías, como representantes del Estado, es una práctica que las comunidades indígenas aplicaron también en 2019, en la peor ola de protestas sociales que vivió el país en décadas.

En la rueda de prensa, Vela rehusó referirse al suceso como una “retención”, e insistió en llamarlo un “secuestro”, por lo que, aseguró, el Estado “recurrirá a medidas de carácter legal para que se sancione” a los responsables.

Ecuador vive desde el martes un estado de movilización social por el que los sindicatos y el movimiento indígena han exhortado a la ciudadanía a bloquear carreteras y manifestarse contra lo que consideran las políticas neoliberales del Ejecutivo de Guillermo Lasso y el alza de los combustibles.

En la jornada de hoy fueron bloqueadas vías en al menos nueve provincias, donde la Policía intervino para abrirlas y despejar a los manifestantes de las carreteras.

Para la ministra, “el pueblo ecuatoriano ha demostrado un día más que quiere continuar trabajando” por el país, y en un balance de la jornada dijo que hubo “bloqueos intermitentes”, el peor caso al sur de Quito, en un cruce de la vía Aloag que conecta la capital con la ciudad de Santo Domingo, al oeste, y con la de Latacunga, al sur.

Estas interrupciones se dieron en una decena de carreteras de las cuales siete de ellas ya han sido despejadas.

Sobre los enfrentamientos en algunos puntos, aseguró frente a denuncias de un uso excesivo de la fuerza que la Policía y las Fuerzas Armadas actuaron “de acuerdo a los derechos humanos” y que no se ha registrado “ningún efecto de afectación en los ciudadanos”.

Ello pese a quejas de grupos sociales y hasta de una ONG que denunció un disparo a “quemarropa” con una bala de caucho contra un periodista.

Vela recordó que los policías son atacados con “voladores (cohetes caseros), palos , piedras y hasta adoquines”, y como consecuencia de ello hay ocho agentes heridos.

Y aseguró que las fuerzas del orden seguirán “garantizando el libre tránsito de los ecuatorianos en todas las vías del país” y “deteniendo a aquellas personas que incurran en ese delito”.

Acerca de los detenidos hasta ahora, varias decenas que los convocantes de la protesta exigen que sean puestos en libertad, indico que nueve ya están en la calle y “tres se encuentran sometidos todavía al proceso de carácter judicial”. EFE