La masacre de este martes 12 de noviembre en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, es la primera matanza de este tipo a nivel del sistema penitenciario desde que Daniel Noboa asumió el poder.
Antes, se registró el asesinato de seis personas en dos hechos distintos; uno en 8 de enero y el otro el 28 de marzo. En el primero murieron dos reos y un guardia, y en el segundo, tres presos muertos y seis heridos tras un motín.
La masacre de este martes en la Penitenciaría deja, según un reporte del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad (Snai), 15 fallecidos y 14 heridos.
De acuerdo con el SNAI, tras los enfrentamientos, el centro carcelario se encuentra intervenido por policías y militares. Mientras que, familiares de los reos de la Penitenciaría llegaron al reclusorio para pedir información.
Recuento de las masacres en Ecuador
La crisis carcelaria en Ecuador empezó el 23 de febrero del 2021 durante el gobierno de Lenin Moreno. Las disputas por el poder en los penales comenzaron a agudizar la convivencia.
Ese día se registró una masacre en la cárcel del Turi, en Cuenca, provincia del Azuay, con saldo de 34 fallecidos. En esa misma jornada se registraron matanzas en la Regional del Guayas, Penitenciaría del Litoral y el CPL Cotopaxi (Latacunga).
En la Regional murieron 31 personas, en la ‘Peni 6, mientras que en Cotopaxi (Latacunga) otros ocho reclusos. Todo esto dejó un saldo de 79 reclusos sin vida y empezaba una de las crisis más fuertes en el sistema penitenciario.
En la jornada del 21 de julio de 2021 se registró otra masacre en las cárceles de Cotopaxi y la Penitenciaría. En el primer penal se contabilizaron 19 muertos, mientras que en la ‘Peni’ otros ocho decesos.
La peor masacre en la historia del país
Pero esa apenas era la punta del iceberg. El 28 de septiembre del 2021 Ecuador enfrentó la peor masacre en la historia carcelaria del país con un saldo de 119 reclusos fallecidos.
Sucedió en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil. Los enfrentamientos entre las bandas Choneros, Chone Killers, Tiguerones, Lobos R7 y otras, comenzaron alrededor de las 9h30.
La masacre empezó con detonaciones de explosivos dentro del reclusorio y se decidió evacuar al personal administrativo. Presos de los pabellones 8 y 9 ingresaron al pabellón 5 y atacaron a sus rivales, dejando 35 muertes y 48 heridos.
Los Tiguerones también atacaron a reclusos de los pabellones 1 y 3 y decapitaron a cinco de ellos; incluso patearon una cabeza por todo el patio. Para lograr ingresar al pabellón 5, los atacantes utilizaron una granada.
Una vez que ingresaron para continuar con la masacre, se enfrentaron con miembros de Los Choneros. Esos disturbios que duraron aproximadamente cinco horas. Para la tarde se dio otro ataque como represalia.
Las muertes en cárceles no pararon
Entre el 12 y 13 de noviembre del 2021 en la Penitenciaría del Litoral se derramaría más sangre. Otro enfrentamiento dejó 68 presos fallecidos en una nueva jornada violenta.
Para el 3 de abril del 2022 se registró otra masacre en la cárcel del Turi, en Cuenca, con saldo de 20 muertos. El 9 de mayo del 2022 en el penal Bellavista de Santo Domingo hubo otra matanza, esta vez de 44 presos.
El 18 de julio del 2022 nuevamente en la cárcel Bellavista asesinaron a 12 reclusos. Las masacres no pararon y el 3 de octubre del 2022 en el CPL Cotopaxi otros 16 asesinados más en nuevos enfrentamientos.
Dos días después en la Penitenciaría del Litoral otros 13 asesinatos se dieron dentro del reclusorio. El 7 de noviembre del 2022 en la cárcel El Inca de Quito otros 5 fallecidos.
El 18 de noviembre del 2022, otra vez en este penal se registró una masacre con saldo de 10 víctimas mortales. Cinco meses después, el 4 de abril del 2023 se registraron tres muertos en La Roca, Guayaquil.
Luego, el 14 de abril del 2023, en la Penitenciaría del Litoral mataron a 12 reos en nuevos enfrentamientos. Del 22 al 25 de julio las masacres se retomaron en esa cárcel 2023 dejando 31 fallecidos.
Ahorcan a sospechosos del crimen de Fernando Villavicencio
Para el 7 de octubre en la ‘Peni’, aparecieron seis presos ahorcados, dejando una nueva masacre. Pero no se trataba de cualquier detenido.
Eran los seis sicarios colombianos sospechosos de haber participado en la ejecución del asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio. A otro de los procesado en el mismo caso lo asesinaron en la cárcel El Inca, de Quito.
Desde la última masacre del 7 de octubre el sistema carcelario parecía tranquilo al mando de Daniel Noboa en Ecuador. Días después de asumir, el 27 de noviembre un preso asesinó a otro interno en disturbios en la cárcel de Lago Agrio.
Cuatro meses después, el 28 de marzo volvieron los problemas, pero no escalaron a masacre. Un motín en la Regional de Guayaquil dejó tres presos muertos y otros seis heridos.