Investigadores de universidades estadounidenses han identificado en el archipiélago de las Islas Galápagos a una tortuga gigante relacionada con otra extinta desde inicios del siglo XX, y que habita en la isla San Cristóbal, informó este jueves el Ministerio del Ambiente de Ecuador.
La especie era hasta ahora conocida como “Chelonoidis chathamensis”, pero tras las investigaciones, los científicos consideraron que no corresponde a esa identificación, sino que debería asignársele una nueva denominación.
Estudios realizados por investigadores de las universidades de Newcastle y de Yale, de la organización Galápagos Conservancy y de otras instituciones aseguran que la denominación “chelonoidis chathamensis” corresponde a una especie que realmente se extinguió, por lo que los individuos que viven ahora en la isla de San Cristóbal deberían ser identificados con otro nombre.
El hallazgo fue el resultado de una comparación de los análisis genéticos de las tortugas que actualmente habitan San Cristóbal con el ADN de tortugas descritas anteriormente.
Y es que los estudios genéticos de tortugas gigantes de Galápagos iniciaron apenas en 1995 y, para finales de 1999, ya se habían descrito, aparentemente, todas las especies sobrevivientes, detalló el Ministerio en un comunicado.
Posteriormente los científicos realizaron investigaciones sobre las especies extintas.
Con los últimos estudios, los investigadores concluyeron que las casi 8.000 tortugas que viven en San Cristóbal “podrían no ser Chelonoidis chathamensis, sino que corresponden a un linaje completamente nuevo, aún no descrito”.
El informe científico advierte, además, de que “el linaje descrito (Cheledonis chathamensis), con base a restos recolectados por la Academia de Ciencias de California en 1906, en cuevas de la parte alta de la isla, podría estar extinto y que en la isla habitaron las dos especies de tortugas conviviendo juntas”.
Actualmente, el equipo de investigadores recupera nuevas muestras de ADN para aclarar el estado de las tortugas y determinar cómo se relacionan la especie actual y la extinta.
Para los científicos, el nombre “Chelonoidis chathamensis” debe asignarse a la especie desaparecida y el taxón vivo debe recibir un nuevo nombre.
Las islas Galápagos, situadas en el océano Pacífico a unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales de Ecuador, son consideradas un inmenso laboratorio natural que ha permitido profundizar estudios a grandes científicos como el inglés Charles Darwin, quien inspiró su teoría sobre la selección natural de las especies en la rica biodiversidad de este archipiélago. EFE