Desde que México pidió visa a los ecuatorianos para entrar a su país, bajó el número de compatriotas detenidos al intentar ilegalmente llegar a Estados Unidos.
Así lo revela un informe de la organización 1-800 Migrante.
Ahora los coyoteros ofrecen, a través de las redes sociales, otras opciones: viajar por agua desde Manta a los países de Centroamérica.
Alfonso Vélez, fiscal de la Unidad de Espacios Acuáticos de Manta, manifestó que esa oferta la promocionan en videos y páginas virtuales, pero aclaró que aún no se han reportado hallazgos de migrantes en las embarcaciones pesqueras. “México empezó a pedir visa desde septiembre de este año, y desde entonces no tenemos ningún caso de tráfico de personas por travesía marítima. Quizás los coyoteros tienen las intenciones de empezar a llevar migrantes en barcos que salen desde Manta, pero no existen denuncias”, expresó.
Vélez recordó que hace 20 años Manta fue el centro de operaciones de una red dedicada al tráfico de personas que funcionaba mediante cinco niveles de jerarquía.
El líder se encargaba de reclutar a los inmigrantes en las provincias de la Sierra. El segundo cabecilla hacía los cobros, y el tercero traía a las víctimas a Manta para dejarlas hospedadas en hoteles. “En ese momento entraba a operar el cuarto cabecilla, quien se encargaba de comprar los alimentos y trasladar a los migrantes desde las playas hasta el barco”, explicó.
El quinto y último jefe al mando de la organización se subía a la embarcación y cumplía la función de coordinador de ruta, dijo Vélez. El “coordinador” obligaba a hasta 100 migrantes a ingresar a las bodegas de forma inhumana. “En ese lugar no había ventilación y debían hacer sus necesidades biológicas de pie. Los inmigrantes no dormían”, expresó el fiscal.
>Naufragio. Vélez agregó que al caer la noche los compatriotas eran llevados a la proa de la embarcación a tomar aire, y en la madrugada volvían a las bodegas para no ser detectados por las autoridades marítimas. En esa época Vélez no era fiscal, sino perito del Consejo de la Judicatura, y debía inspeccionar las embarcaciones que eran retenidas por tráfico de migrantes. “Además de las víctimas y el coordinador, en el barco viajaban un cocinero y el capitán que dirigía la travesía del viaje”, indicó Vélez.
Él contó también que en esa época los migrantes eran llevados a México para ingresar a Estados Unidos caminando a través de las fronteras que dan a los estados de California, Arizona, Nuevo México y Texas. Otros compatriotas eran llevados a Guatemala y El Salvador, para ser trasladados vía terrestre a México y finalmente cruzar la frontera a Estados Unidos.
El fiscal recordó que en una ocasión tuvo que inspeccionar las mochilas de 120 migrantes y todos llevaban “raspaduras”. Este dulce típico aporta energía, y era consumido por los compatriotas mientras caminaban hacia las fronteras de Estados Unidos.
En el 2005, una embarcación pesquera con 113 migrantes naufragó, y solo nueve personas sobrevivieron cuando iban rumbo a Guatemala. Este hecho ocurrió el 14 de agosto frente a Colombia, cuando una ola viró el barco. El fiscal dijo que las víctimas sobrevivieron porque se sostuvieron flotando con un pedazo de madera.
“Recuerdo que los sobrevivientes tenían la piel quemada del sol. Incluso no podían abrir los ojos porque les molestaba la luz del sol. Esa tragedia fue noticia mundial porque los coyoteros escaparon en una lancha mientras que los migrantes morían ahogados. Entre las víctimas había hasta niños”, expresó. Los sobrevivientes fueron rescatados por un barco pesquero, y al llegar a Manta narraron que algunos tripulantes fallecieron al no soportar los calambres por el agua fría. Otros entraban en desesperación y abrazados desaparecían en el agua.
>En la playa. El 7 de agosto del 2006, una lancha pesquera identificada como María José naufragó frente a la playa de Santa Rosa, al sur de Manta.
En la playa se hallaron siete cadáveres. Eran personas de la Sierra que, según informaciones policiales, intentaban llegar a un barco para salir del país.
La Policía indicó en esa ocasión que la lancha se viró con cerca de 18 personas. De las demás nunca se supo el paradero.
De acuerdo con la página web Customs and Border Protection, en octubre de este año 813 compatriotas fueron detenidos en los EE. UU., principalmente en la frontera con México.
En septiembre este número llegó a 7.419; en agosto, a 17.682; en julio, a 17.405; en junio, a 12.869; en mayo, a 11.766, y en abril, a 8.127.