Cuenca acogerá este jueves y viernes la XIX Cumbre Iberoamericana con un récord de ausencias en los 30 años de historia del foro.
A este encuentro solo está prevista la asistencia de cinco jefes de Estado.
España tomará el relevo para acoger la próxima cita en 2026.
Nunca antes habían acudido a una Cumbre Iberoamericana tan pocos jefes de Estado y de Gobierno de los 22 países que participan.
Sin embargo, en los últimos años la tónica ha sido hacia una menor presencia de mandatarios a pesar de que desde 2014 la cita es bienal. Esto precisamente para tratar de propiciar precisamente el interés y la asistencia.
En esta ocasión, además del presidente ecuatoriano y anfitrión, Daniel Noboa, han confirmado su presencia el presidente de República Dominicana, Luis Abinader, el de Paraguay, Santiago Peña, así como el portugués, Marcelo Rebelo de Sousa.
Tanto España como Portugal participan por partida doble, ya que asisten tanto el jefe de Estado como el jefe de Gobierno.
Sin embargo, ni Pedro Sánchez, que se mantendrá en España para gestionar las consecuencias de la DANA, ni Luis Montenegro viajarán hasta Cuenca.
Países sin representantes en la Cumbre de Cuenca
Además, y a diferencia de lo que había venido siendo la tónica general, no todos los países que no envían a su jefe de Estado estarán representados, aunque sea a menor nivel.
Esto pone de manifiesto que el foro está perdiendo interés ya que prefieren no tener voz en lo que se debata.
Además, complica el que se pueda adoptar una declaración final por consenso, como ha venido siendo la práctica desde la primera cumbre en Guadalajara (México) en 1991.
Fuentes de la Cancillería ecuatoriana han confirmado a Europa Press que serán finalmente 19 los países presentes en Cuenca, lo que deja fuera a los tres con los que Ecuador no mantiene relaciones. Esto a pesar de que sí han participado en todas las reuniones preparativas para la cita.
En cuanto a los motivos alegados por el resto de mandatarios son varios, pero en buena medida ha pesado la poca sintonía que Noboa tiene con muchos de sus colegas de la región, hasta el punto de que Ecuador no tiene relaciones diplomáticas con México, Venezuela y Nicaragua.
Los tres países las interrumpieron después de que la Policía ecuatoriana asaltara la Embajada mexicana en Quito para detener al ex vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas el pasado mes de abril. Con todo ninguno de los tres países envió a sus presidentes en la cita anterior.
Razones por las que no acuden a la Cumbre
Por su parte, el presidente de Argentina, Javier Milei, había sido de los pocos que había confirmado pero finalmente ha optado por viajar a Estados Unidos para reunirse con su presidente electo, Donald Trump.
En el caso de los presidentesde Perú y Chile, Dina Boluarte y Gabriel Boric, asisten a la cumbre de la APEC en los mismos días, mientras que el mandatario brasileño, Luiz Inazio Lula da Silva, ha preferido quedarse en Brasil ya que lunes y martes será el anfitrión en Río de Janeiro de la cumbre del G20.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se había excusado porque tenía previsto asistir a la COP29 en Azerbaiyán pero finalmente se ha quedado en el país ante las graves inundaciones registradas. También las complicadas situaciones internas en sus respectivos países han llevado a los mandatarios de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y de Bolivia, Luis Arce a no viajar.
No obstante, la logística también es un factor a tener en cuenta, ya que Cuenca, de casi 600.000 habitantes y situada a 2.500 metros de altitud, no cuenta con un gran aeropuerto hasta el que puedan llegar con facilidad los aviones oficiales.
En la elección parece que ha pesado su seguridad, dados los problemas de este tipo que ha venido experimentando Ecuador en el último año, incluido un nuevo motín en una cárcel este mismo martes en Guayaquil, principal foco de inseguridad, que se ha saldado con una quincena de presos muertos.