Jennifer López no deja de sorprender. Durante su más reciente concierto en el Lucca Summer Festival, en Italia, la cantante se sinceró ante su público con una serie de comentarios explícitos que desataron reacciones encontradas y volvieron a ponerla en el centro de la controversia. “A veces me gusta duro”, confesó sin titubeos, arrancando gritos y aplausos, pero también críticas.
El show del 21 de julio fue todo menos convencional. Entre coreografías, luces y nuevos temas, la intérprete de On the Floor se permitió hablar de su vida íntima con humor y naturalidad: “A veces tengo diferentes estados de ánimo por la noche… otros días me siento romántica, enciendo velas y me gusta muy lento. Pero hay días que me siento un poco más traviesa”, dijo ante miles de asistentes.
Sus palabras sorprendieron incluso a sus seguidores más fieles, que no esperaban escuchar de la propia artista detalles tan explícitos sobre sus preferencias sexuales.
Música nueva con dedicatoria especial
Ese mismo concierto sirvió como escenario para estrenar en vivo Up All Night, una canción que muchos interpretan como un mensaje directo para su ex pareja, Ben Affleck. Con versos como “Me cansé de que me derribaras / Mírame ahora”, López parecería marcar distancia definitiva tras una relación tan mediática como turbulenta.
Según reveló una fuente cercana a The Sun, el nuevo material de la artista está inspirado en ese capítulo sentimental: “Esta es una nueva era para Jennifer y no va a reprimirse”, aseguró.
Coreografía polémica en Tenerife
Días antes, el 20 de julio, López también generó controversia en el Cook Music Fest, en Tenerife, España. Allí, luciendo un body plateado y botas del mismo tono, protagonizó junto a sus bailarines un número cargado de sensualidad, con poses y movimientos que algunos calificaron de “hipersexualizados”.
La coreografía dividió opiniones en redes. Mientras miles de seguidores defendieron su derecho a expresarse artísticamente, críticos conservadores, como la comentarista Megyn Kelly, no tardaron en lanzar reproches, tildándola de “estrella de soft porn (pornografía suave)”. Las respuestas de los fans fueron inmediatas, acusando a Kelly de ser “retrógrada” y de no entender la provocación como parte del show.
Jennifer López sin freno y sin filtros
Lejos de responder oficialmente a las críticas, Jennifer López continúa su gira europea, que concluirá el 12 de agosto en Cerdeña. Mostrando que no tiene intención de suavizar su propuesta escénica ni sus mensajes.
Entre música, provocación y autenticidad, JLo vuelve a demostrar que sigue fiel a sí misma. Irreverente, atrevida y dispuesta a hablar sin censura, incluso de lo más íntimo. Una artista que, para bien o para mal, nunca pasa desapercibida.