La Justicia brasileña ha prohibido al Gobierno Federal hacer uso de sus redes sociales y canales oficiales para hacer propaganda en favor del presidente, Jair Bolsonaro, y deberá retirar todas aquellas publicaciones que se hayan lanzado en ese sentido hasta el momento.
La decisión judicial, contra la que cabe recurso, se da tras una denuncia de la Fiscalía, que se ha amparado en el Artículo 37 de la Constitución que delimita este tipo de publicaciones siempre y cuando tengan “carácter educativo, informativo y de orientación social”, no así con intención de “promoción personal”.
En esas, la jueza federal Katia Balbino ha señalado que el Gobierno Federal estaría utilizando sus canales oficiales “para transmitir un mensaje irrefutable de enaltecimiento de la personalidad del presidente de la república”.
En las publicaciones presentadas por la Fiscalía a modo de prueba, destacan por encima de todo imágenes de un Bolsonaro exultante, cuyas frases e ideas políticas se ponen por encima de cualquier otra comunicación, lo que “denota, en efecto, el carácter de promoción personal del implicado”.
Por otro lado, Bolsonaro también ha tenido que negar ante el Tribunal Superior Electoral (TSE) que haya estado haciendo propaganda electoral contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva fuera del plazo marcado por las autoridades de cara a las próximas elecciones previstas para octubre de este año.
El equipo legal de Bolsonaro niega la demanda presentada por el Partido de los Trabajadores (PT) en relación a unas declaraciones contra Lula durante un evento el pasado mes de enero en el Palacio de Planalto que se retransmitió a través de los canales oficiales del Gobierno Federal.
Según la demanda presentada por el PT, Bolsonaro “promovió una verdadera propaganda anticipada en favor de su reelección” y de manera “negativa en relación al señor Luiz Inácio Lula da Silva, también precandidato a la Presidencia de la república” y que según la encuestas está en primer lugar en intención de voto.
En aquel vídeo al que hace referencia el PT, se ve a Bolsonaro no solo insinuando que Lula estaría ya “repartiendo ministerios”, sino también que su posible vuelta al poder significaría “el retorno del criminal a la escena del crimen”, recoge el periódico brasileño ‘O Globo’.
En ese sentido, el todavía presidente de Brasil estaría utilizando un “aparato de la red de comunicación pública para propagar ideas electorales negativas en detrimento de su posible adversario político”, por lo que el PT ha solicitado una multa de 25.000 reales (unos 4.200 euros).
Sin embargo, para sus abogados no se habría roto ninguna normativa electoral, puesto no existe contenido alguno en este sentido, puesto que a pesar de que Bolsonaro se refiere a Lula como una personas con una “vida inmunda anterior” y enumera algunos episodios negativos de su gestión, en ningún momento hay una “petición explícita” de apoyo o no apoyo electoral.
La causa está ahora en manos del juez del Tribunal Supremo Alexandre de Moraes, quien ya tiene sobre su mesa otras demandas contra el presidente por diversos motivos, algunas de ellos por ataques a la instituciones, difusión de noticias falsas, en incluso revelación de información clasificada.