La mañana de este domingo 10 de enero, los comerciantes sacaban, entre lágrimas, los escombros en los que las llamas convirtieron sus productos.
Aunque pronto serán reubicados, ellos dicen sentirse tristes por la mala manera en la que empezaron el año.
Alexandra Castillo, administradora de ese centro de abastos, indicó que la prioridad es instalar a los comerciantes afectados en otros sectores del Mayorista. Sin embargo, ellos se oponen a que los reubiquen a la intemperie porque las frutas se deshidratan con el sol, detalla diario El Comercio.
