Los investigadores han hallado nuevas evidencias de una pérdida sustancial de hielo en la Antártida Oriental durante un período cálido interglacial hace unos 400.000 años.
Su examen sugiere que la pérdida de hielo en esta región podría agregar de 3 a 4 metros al futuro aumento del nivel del mar global, según publican en la revista ‘Nature’.
Las preguntas sobre la estabilidad de la capa de hielo de la Antártida Oriental son una fuente importante de incertidumbre en las estimaciones de cuánto aumentará el nivel del mar a medida que la Tierra continúe calentándose.
Durante décadas, los científicos pensaron que la capa de hielo de la Antártida Oriental se había mantenido estable durante millones de años, pero estudios recientes han comenzado a poner en duda esta idea. Ahora, los investigadores de la Universidad de California Santa Cruz han reportado nuevas evidencias de pérdida sustancial de hielo de la Antártida Oriental durante un período cálido interglacial hace unos 400.000 años.
El estudio se centró en la cuenca de Wilkes, una de varias cuencas en forma de cuenco en los bordes de la capa de hielo que se consideran vulnerables a la fusión porque el hielo descansa en la tierra que está debajo del nivel del mar. La cuenca de Wilkes actualmente contiene suficiente hielo para elevar el nivel del mar de 3 a 4 metros.
El hielo fluye lentamente a través de las cuencas desde el interior del continente hasta las plataformas de hielo flotantes en los márgenes. La pérdida de hielo hace que la línea de puesta a tierra, el punto en el que el hielo pierde contacto con el suelo y comienza a flotar, se desplaza tierra adentro, explica el primer autor Terrence Blackburn, profesor asistente de ciencias de la Tierra y planetarias en la Universidad de California en Santa Cruz.
En otras palabras, un período de calentamiento global comparable a lo que se espera en los escenarios actuales para las emisiones de gases de efecto invernadero producidas por el hombre dio como resultado un aumento en el nivel del mar de alrededor de 13 metros. Por supuesto, esto no sucedería de una vez porque lleva mucho tiempo derretir tanto hielo.
El problema con el estudio de los períodos interglaciales durante el Pleistoceno es que todos terminaron en otra edad de hielo cuando la capa de hielo avanzó nuevamente y cubrió la evidencia. Para el nuevo estudio, Blackburn y sus colegas utilizaron una técnica novedosa basada en mediciones de isótopos en depósitos minerales que registran cambios pasados en fluidos subglaciales.