Meta impulsa la interacción con dispositivos electrónicos usando una pulsera avanzada que detecta los movimientos de las manos. Este dispositivo integra tecnología de electromiografía de superficie (sEMG) para captar señales musculares mediante sensores colocados en la muñeca. La pulsera convierte esos impulsos en comandos para controlar dispositivos como gafas inteligentes, haciendo posible una comunicación más natural y directa.
El equipo de Meta Reality Labs desarrolla este sistema de control que combina aprendizaje automático e inteligencia artificial para adaptar los dispositivos a cada usuario. La tecnología sEMG no solo interpreta gestos físicos como tocar, deslizar o pellizcar, sino que incluso puede reconocer la intención de movimiento sin ejecución real, lo que abre un nuevo paradigma en la interacción hombre-máquina.
Meta: innovación en control electromiográfico
El prototipo en forma de pulsera destaca por ofrecer una experiencia intuitiva y fluida, capaz de traducir señales neuronales en comandos precisos sin calibración individual. Meta ha entrenado extensas redes neuronales con datos de miles de participantes para garantizar el reconocimiento fiable de gestos sutiles en diferentes usuarios. Esto representa un avance significativo frente a tecnologías tradicionales que requieren calibración personalizada y limitan la usabilidad general.
La capacidad de esta pulsera para interpretar la escritura manual sobre superficies rígidas permite enviar mensajes de manera ágil y discreta, ampliando las aplicaciones del control por electromiografía. Por otro lado, el dispositivo se muestra cómodo y no invasivo, evitando los inconvenientes de accesorios voluminosos y ofreciendo una alternativa para situaciones en las que la interacción por voz no resulta práctica o deseable.
Aplicaciones y beneficio social
Esta tecnología revolucionaria no solo facilita el uso cotidiano de dispositivos tecnológicos, sino que también podría mejorar la independencia de personas con discapacidades motoras al ofrecerles nuevas formas de control y comunicación. Meta ha documentado sus avances publicándolos en la revista científica Nature para fomentar la colaboración y el desarrollo en la comunidad científica.
Además, el prototipo muestra una precisión superior al 90% en reconocimiento de gestos y escritura, logrando una velocidad equiparable a la de un teclado móvil. Este nivel de desempeño lo posiciona como una futura interfaz de usuario que podría reemplazar dispositivos tradicionales.