La Empresa de Agua Potable y Alcantarillado de Santo Domingo alertó sobre un riesgo crítico en el kilómetro 83 de la vía Alóag–Santo Domingo. En este sitio se desarrollan las obras de saneo del talud que podrían dañar una tubería de acero de 700 mm. Si aquello ocurre provocaría un colapso total del servicio de agua en la ciudad.
Advertencia técnica de la Empresa de Agua
La advertencia fue enviada oficialmente al Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Provincial, donde se detalla que el muro de contención que protege la tubería presenta fracturas visibles. Esto es consecuencia de la caída constante de rocas y escombros en el área intervenida por los trabajos de estabilización vial.
Según el comunicado de la Gerencia de la Empresa de Agua, la falta de acciones preventivas podría derivar en una rotura de la tubería. De suceder, se requeriría el cierre inmediato de válvulas de paso. Aquello interrumpiría el abastecimiento de agua potable a toda la población urbana de Santo Domingo.
Una infraestructura clave en riesgo
La tubería de 700 milímetros de diámetro es una de las principales conducciones de agua cruda desde la zona alta hasta la planta de tratamiento ubicada en el kilómetro 7½ de la vía a Quito. Su funcionamiento es esencial para el sistema de distribución de agua de la ciudad.
La empresa denunció que el contratista, el fiscalizador y el administrador del contrato de obras no han coordinado acciones con la entidad para implementar medidas de protección adecuadas. Las actividades continúan sin resguardo efectivo de la red hidráulica.
Precedente de enero refuerza alerta
En enero de 2024, una situación similar provocó la suspensión del servicio de agua potable durante varios días, debido a la rotura de la misma tubería. En aquella ocasión, la causa fue un evento natural. Sin embargo, el escenario actual resulta más preocupante, ya que el daño potencial proviene directamente de la intervención humana.
La Empresa de Agua recuerda que en esa emergencia fue necesario ejecutar un plan de contingencia con tanqueros para abastecer a sectores estratégicos, lo cual implicó un alto costo logístico y operativo.
El riesgo advertido por la empresa coincide con la reciente ampliación del cierre de la vía Alóag–Santo Domingo hasta el 19 de junio de 2025. La decisión que busca proteger a los usuarios durante las labores de estabilización del talud. Sin embargo, la obra no contempla aún un esquema de protección específico para la tubería.
La empresa solicita que se adopten medidas inmediatas para evitar una afectación directa a la infraestructura hidráulica. Y advirtió que una rotura tomaría varios días de reparación y podría dejar a miles de personas sin agua potable (21).