El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) trasladó a 150 reos diagnosticados con tuberculosis al Centro de Rehabilitación Social Masculino Guayas Nº 4, en Guayaquil, el 7 de junio de 2025, para garantizarles atención médica especializada en un pabellón acondicionado, en respuesta a la crisis sanitaria en las cárceles ecuatorianas.
Crisis sanitaria en los centros de rehabilitación
El traslado de 150 reos con diagnóstico de tuberculosis al Centro de Rehabilitación Social Masculino Guayas Nº 4 marca un paso clave para enfrentar la propagación de esta enfermedad en el sistema penitenciario. Según el SNAI, el pabellón asignado cuenta con insumos médicos adecuados y personal capacitado del Ministerio de Salud Pública (MSP). Este movimiento busca mejorar las condiciones de los internos y frenar los contagios en Guayas.
La decisión llega tras meses de alertas. Organismos de derechos humanos y familiares de reclusos exigían un área especializada para tratar esta enfermedad. En mayo de 2025, un informe del MSP reveló que 600 presos en el país padecen tuberculosis, de los cuales 553 están en la Penitenciaría del Litoral. Este dato encendió las alarmas sobre las condiciones sanitarias en las prisiones. Ahora, el SNAI refuerza el modelo de salud penitenciaria para garantizar atención digna.
¿Por qué hay casos de tuberculosis en cárceles?
La tuberculosis es un problema grave en los centros penitenciarios debido al hacinamiento y la falta de ventilación. En Guayas, la situación es crítica. La Penitenciaría del Litoral, la cárcel más grande del país, reporta 565 reos en tratamiento, según el MSP. A nivel nacional, 1.115 casos están bajo tratamiento completo.
El MSP asegura que no hay muertes confirmadas por tuberculosis en cárceles. Sin embargo, la muerte de cinco reos en la Penitenciaría del Litoral en marzo de 2025 generó controversia. Un parte policial señaló esta enfermedad como posible causa, pero el MSP aclaró que los fallecidos no estaban diagnosticados. Las autopsias aún no confirman las causas exactas, lo que mantiene la incertidumbre.
Por su parte, el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) de Guayaquil pidió declarar una crisis sanitaria. La organización denunció que la atención médica en la Penitenciaría del Litoral es precaria, lo que agrava los casos de tuberculosis y otras enfermedades como la sarna. La falta de continuidad en los tratamientos también genera resistencia a los medicamentos, complicando la recuperación.
Medidas para el control y prevención
El traslado al Centro de Rehabilitación Social Masculino Guayas Nº 4 busca aislar a los reos enfermos en un espacio con ventilación adecuada y supervisión médica constante. El MSP implementa monitoreo semanal, tamizaje y recolección de muestras para un diagnóstico rápido. Además, el pabellón ofrece apoyo psicológico y tratamiento específico.
El SNAI destacó su compromiso con un sistema penitenciario más justo. Sin embargo, no se ha informado el estado de salud actual de los 150 reos trasladados ni su centro de origen. Esta falta de detalles genera preocupación entre familiares, quienes exigen transparencia. El Municipio de Guayaquil, por su parte, solicitó al SNAI un informe oficial tras las muertes de marzo, reforzando la necesidad de protocolos claros para evitar más contagios.
El problema de la tuberculosis en cárceles no es exclusivo de Ecuador. A nivel global, la incidencia en prisiones es hasta 50 veces mayor que en la población general, según estudios. Factores como la desnutrición y el hacinamiento agravan la situación, convirtiendo a las cárceles en focos de contagio. En Guayas, el MSP y el SNAI trabajan en coordinación para aplicar medidas de prevención, pero el desafío persiste. MV