El incendio que dejó pérdidas económicas, se registró ayer a eso de las 14h00, en las viviendas ubicadas en la calle 8 y avenidas 17 y 18. De esta desgracia cuatro familias afectadas quedaron en la calle. El incendio se habría originado cuando explotó un cilindro de gas en una embazadora clandestina de este producto. Pérdidas cuantiosas Las familias son las familias Álava y Palma. Pese a que no se registró desgracias personales, las pérdidas fueron cuantiosas. Una de las señoras que vivía en uno de los departamentos, debido al humo sufrió asfixia, pero como los bomberos estaban cerca, la socorrieron, después de reanimarla la llevaron al hospital. Personal de los bomberos tuvieron una difícil tarea, que fue la de controlar que el fuego no contaminara otras casas. Testigos dijeron que desconocían en dónde inició el incendio, ya que fue de manera abrupta, después de explotar un cilindro de gas. Las viviendas que se quemaron son propiedad de la familia Ávila, quienes tenían las casas alquiladas. Sofonías Rezabala, jefe del Cuerpo de Bomberos, manifestó que las investigaciones serán quienes arrojen qué inició el fuego. Pues bien pudo ser una fuga de gas o un cortocircuito. Rezabala manifestó que ninguna de las personas que habitan en una de las casas les proporcionó el nombre del presunto dueño de la embazadora, ya que querían ubicarlo al menos para que diera su versión de los hechos. “Uno de nuestros temores era encontrar alguna persona muerta dentro de las casas, pero gracias a Dios no fue así”, explicó el bombero. Para aplacar las llamas demoraron alrededor de dos horas, y actuaron alrededor de 80 bomberos. Rezabala dijo que debido a la vetustez de las viviendas, una pared amenazaba con caerse, por lo que solicitó que personal del Municipio la derribara, para evitar alguna desgracia.