En el hospital Verdi Cevallos Balda, por ejemplo, el pasillo de la consulta externa se ha vuelto incómodo ante las decenas de personas que llegan a atenderse. Aquí según el director de esta casa de salud, Carlos Almeida, acuden más de 200 pacientes al día, que en su mayoría son niños. Hace unos meses la demanda era la mitad. Almeida agregó que han solicitado al Ministerio de Salud se financie la ampliación de esta sala para mayor comodidad, pero aún no tienen respuesta. María García llegó a las 07h00 con su hijo en brazos. El niño tenía fiebre. Era casi el mediodía y aún esperaba sentada en el pasillo. Enrique Sornoza, en cambio, buscaba un especialista para un problema en una de sus rodillas y la espera fue larga. “Si tuviera dinero no vendría a pasar peripecias al hospital", dijo Sornoza. En el centro de salud Portoviejo la demanda también se ha incrementado. Ayer decenas de madres pugnaban para que sus hijos fueran vacunados y atendidos en pediatría. Una de las encargadas del centro indicó que se atiende a unas 150 personas diarias y al igual que en el hospital la mayoría son niños. Katerine Bazurto, oriunda de la parroquia Calderón, acudió con su hijo de dos meses a vacunarlo y se quejó porque tuvo que esperar más de tres horas. IESS En el hospital del IESS la demanda también es alta. Aquí al día se emiten más de 350 turnos para consulta externa, siendo las especialidades más solicitadas cardiología, diabetología, traumatología y medicina general. La directora la casa de salud, Aracely Romero, mencionó que los niños enferman por los cambios bruscos de la temperatura y ante la cercanía del invierno, lo cual los vuelve vulnerables a enfermedades respiratorias y cuadros diarreicos.