Pompilio asumió la presidencia de la entidad deportiva más popular del país el 1 de junio, tras ganar las elecciones con el 75 por ciento de los votos, y sucedió en el cargo a Mauricio Macri, actual jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires. El mandato del dirigente, cuyo proyecto más ambicioso era ampliar el estadio "La Bombonera" con obras que comenzarían el mes próximo, finalizaba en el 2011. El presidente boquense era empresario, propietario de una papelera, casado y con dos hijos. Supenden entrenamientos La noticia de la muerte de Pompilio interrumpió el entrenamiento del equipo en las instalaciones de "Casa Amarilla", situadas junto al estadio. Fuentes cercanas al entrenador Carlos Ischia dijeron que tanto éste como los futbolistas se encerraron en el vestuario, conmocionados por el hecho, tras abandonar el campo de juego donde efectuaban ejercicios físicos. Más tarde se retiraron del club sin hablar con la prensa. Pompilio fue el gestor de la reincorporación al Boca Juniors de Juan Román Riquelme a finales del 2007, tras su paso por los españoles Barcelona y Villarreal, cuando era vicepresidente en ejercicio tras el alejamiento de Macri, en el que ha sido el fichaje más caro de la historia del fútbol argentino. Fútbol argentino de luto Julio Comparada, presidente del Independiente de Avellaneda, el primer dirigente que habló tras la muerte de Pompilio, dijo que "ha fallecido un hombre capaz, un directivo importante, y todo el fútbol argentino está de luto".