Djokovic, que ha ocupado el tercer puesto desde el 9 de julio del 2007, tenía hoy viernes opción al asalto, pero se debían dar dos condicionantes, que él ganara su partido de cuartos contra el español Albert Montañés, a quien derrotó por 6-2 y 6-3 en 77 minutos, y que Nadal perdiera con Moyá, pero el de Manacor se deshizo del de Palma, por 6-1 y 6-3 en 74 minutos para anular ese posible escenario. Mañana sábado tendrá lugar ese partido crucial, el décimo enfrentamiento entre ambos, hasta ahora con ventaja de Nadal por 6-3, aunque el español ha perdido el último de ellos, este año en semifinales de Indian Wells. "Es un partido muy importante, sí, pero yo estoy muy contento de estar en la semifinales de este gran torneo de nuevo, y sobre todo como empecé la semana con las ampollas en el pie", dijo Nadal, quien alabó el juego de Djkovic. "Es el mejor jugador del año, y sin duda uno de los máximos candidatos a finalizar la temporada como número uno del mundo junto con Federer, y conmigo, claro". Mientras, el suizo Roger Federer, en busca de su quinto título en Hamburgo, venció a Fernando Verdasco por 6-3 y 6-3, repitiendo la victoria que logró sobre el madrileño en la primera ronda de este mismo torneo hace tres años, en su único enfrentamiento hasta hoy. Las alarmas se dispararon cuando el médico del torneo tuvo que saltar a la pista con 3-2 en el segundo set, y vendar el pie derecho de Verdasco. Desde ese momento Fernando no volvió a ganar un solo juego. Al principio se pensó que la lesión sería de importancia y que Verdasco podría no llegar a tiempo para París, pero las últimas noticias confirman que no es de tanta gravedad. "Sentí un dolor agudo en el tobillo en el cuarto juego, justo cuando estaba empezando a hacerle sufrir", dijo Fernando. Djokovic, solventó su partido contra el español Albert Montañés con un contundente 6-2 y 6-3, y después mostró su agrado por tener a tiro el número dos del mundo. "Siempre es un gran sentimiento poder merecerlo", dijo el serbio que coincidió con Nadal en que era un partido especial. "Pero intento no pensar sobre ello y crearme una presión extra. Lo encararé como si fuera otro encuentro más", añadió. "He ganado una experiencia mental y fuerza física, me siento al máximo", dijo Djokovic, campeón del Abierto de Australia y del Masters Series de Roma. Federer se enfrentará contra el italiano Andreas Seppi, que alcanzó su primera semifinal del año al doblegar a alemán Nicolas Kiefer en tres horas y 13 minutos por 6-3, 5-7 y 7-5. Si vence a Seppi, el suizo alcanzará la final sin medirse en todo el camino con un solo cabeza de serie.