Por ello, Villacís indicó que se debe mantener la unidad del pueblo y evitar fragmentaciones como las que podrían darse con la decisión de la Conaie. El MPD, que apoya al Gobierno, considera que el enemigo del pueblo es el sector que no desea los cambios, así como "todas las expresiones de neoliberalismo encarnados en dirigentes de la derecha ecuatoriana", agregó Villacís. Reiteró la necesidad de continuar "férreamente unidos, toda la tendencia de izquierda, democrática y patriótica, en apoyo de los cambios trascendentales que se están implementando en la Asamblea Nacional Constituyente". Esos cambios, indicó, van "en la búsqueda de un Ecuador con soberanía, justicia social, educación, salud y con iguales oportunidades para los trabajadores y Pueblos del Ecuador". Villacís dijo estar dispuesto a propiciar, la próxima semana, una reunión entre representantes del Gobierno, de la Conaie y de grupos de izquierda, entre otros, para analizar la situación actual del país. El vicepresidente de Ecuador, Lenín Moreno, advirtió hoy que se sancionará a quienes intenten bloquear carreteras en alusión a eventuales acciones de la Conaie, que ayer se declaró en oposición al Gobierno presidido por Rafael Correa. Moreno, que está a cargo de la Presidencia de la República mientras Correa realiza una gira por Europa, recordó que la Constitución establece sanciones contra quienes impidan la atención en los servicios públicos o la libre circulación de la gente. En caso de que alguna de esas situaciones ocurra, dijo Moreno, "definitivamente tendrán una sanción". La Conaie declaró su oposición abierta al Gobierno de Correa, al que hasta ayer había apoyado, por considerar que su proyecto político no obedece a intereses sociales. "Es una oposición abierta contra el modelo político del presidente de la República. Hemos agotado todo el espacio de diálogo", dijo Marlon Santi, presidente de la Conaie, tras asegurar que no tienen "confianza con aquellos Gobiernos que no están con los movimientos sociales". La decisión la adoptó ayer la Conaie en una reunión que convocó para analizar la situación del país, tras la que criticó la posición que adoptó el jefe de Estado sobre la explotación minera, que en muchos casos afecta a sus territorios ancestrales. En concreto, esa organización acusó a Correa de alinearse con empresas extranjeras cuyas actividades mineras consideran que han perjudicado a las comunidades indígenas. Santi pidió a instituciones internacionales, como la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que vigilen al Gobierno ecuatoriano "en materia indígena". Sin embargo, la Conaie manifestó su confianza en la Asamblea Constituyente, que redacta la vigésima Carta Magna del país, así como en su presidente, Alberto Acosta. La cifra de indígenas en Ecuador no es muy precisa y los cálculos van desde el 10 por ciento de algunas estadísticas oficiales al 35 por ciento que señalan algunas organizaciones de los casi 14 millones de ecuatorianos. EFE