El tabaquero cubano José Castelar Cairo, autor de varios habanos gigantes que le han valido certificaciones en el libro Guinness de los récords, ha vuelto a romper en La Habana la marca del cigarro más largo del mundo con un puro de 45,38 metros. "Cueto", como es conocido este torcedor con 47 años de oficio, comenzó a liar el puro el pasado día 3 y lo finalizó ayer, viernes, en el marco de la Feria Internacional de Turismo, según informa hoy la prensa local.