En el año 2000 Manabí le dio 6 meses de plazo a las “autoridades nacionales” para que concreten la autonomía de la provincia. Ahora entre esas autoridades embestidas de plenos poderes se encuentra doña Tatiana, don Humberto, Tito Nilton, Trajano, Leonardo y otros más autonomistas convencidos, que recibieron del pueblo ecuatoriano el plazo de 6 meses para redactar una Constitución; en ella debe asegurarse que el centralismo muera en el 2008. Los cantones y provincias deben pasar a ser los sujetos activos y autónomos de la gestión pública y del desarrollo homogéneo de todo el país. Ya sé que hay oposición de los centralistas infiltrados en la Asamblea y en las esferas que influyen en su contenido (del buró de doce, 4 son de la costa y 8 de la sierra). Ya sé que argumentan que dizque no se puede perder la inversión de 15 millones en el edificio del Congreso Nacional, como si eso pesara en un Presupuesto General de 15 mil millones, como si no se lo pudiese usar en otra cosa, como por ejemplo sede de congresos o encuentros internacionales. ¡Son cuentos Mariano, puro cuento!. Argucias para seguir concentrando en una sola ciudad el poder de gestión pública de 24 provincias y 219 cantones y, por supuesto, seguir manejando para sí el presupuesto y el petróleo ecuatoriano, Mariano. Mariano no te puedes quedar en el pedido y el reclamo. Manabí es tu tierra, la tierra del machete, la tierra de Alfaro, tienes que conseguir concretar el resultado. Para ello me permito proponerte públicamente que realices un recorrido por otras provincias y te ganes una a una el apoyo a tu causa, que es de todos. No me sorprendería que Jaime Nebot, por ejemplo, apoye vuestro mandato; Montgomery Sánchez, igual. Quizás el Alcalde de Cuenca está interesado en que la Corte Suprema tenga sede en su ciudad y encuentre estratégico sumar esfuerzos. En fin, has las consultas y sobretodo has pronto las gestiones para unir a todo el Ecuador en una sola causa, la de entregar poder real a las ciudades y provincias de todo el país. No menos del 50% del presupuesto del estado es lo que los gobiernos locales deben manejar en forma autónoma al asumir las competencias descentralizables, es decir todas menos fuerzas armadas. La cancillería también debe quedar en Quito, por las embajadas; pero la Escuela de Diplomacia debe salir urgentemente de allí, ya que se han adueñado asquerosamente de las representaciones diplomáticas. No es de iniciar el baratillo de ofertas para ver qué ciudad se queda con qué. Es cuestión de darle a todos al menos el 50% del poder real público, ¡ya es bastante que una sola ciudad se quede con el 50% restante! "Debe asegurarse que el centralismo muera en el 2008"