Galo Molina (52) debe hacer proezas con su carreta de venta de frutas porque sus clientes están en los barrios San Francisco, Las Marías y Recreo Aray, cuyas calles están intransitables, llenas de lodo. Para evitarse más problemas circula por las aceras. “Aunque las lluvias disminuyeron la situación sigue igual que hace 30 años, nada ha cambiado, estamos iguales o peor que antes”, dijo Dora Intriago, del barrio Recreo Aray, para quien las “aceras antitécnicas” que construyo el cabildo se han convertido en tapes que no permite la evacuación del agua.