Que el mar necesita como ingrediente el agua de los ríos, es también otra verdad. Esto no significa, en ningún caso que toda el agua camine hacia los océanos. Uruguay nos brinda un bellísimo ejemplo del agua aprovechada, que está retenida, provisionalmente en pequeños estanques. El levantamiento de bosques junto a los estanques, garantiza la conservación de la humedad y la generación de nuevas lluvias. Significa todo esto que todo buen invierno hay que saberlo aprovechar. La televisión chilena, en su espacio internacional, acaba de anunciar de las bondades que existen en la provincia de Manabí, como el hecho del agua, no lo suficientemente explotada para generar mejores índices de producción. Países como Israel, que tienen serios problemas en la obtención del agua, nos dan inversamente una distinta configuración. En el caso concreto de Manabí, es urgente dos represas sobre los valles de Rocafuerte y Charapotó, por lo menos de cincuenta millones de metros cúbicos cada una. Los bosques que se fomentarán junto a estas represas, garantizarán, además de la producción excelente, verdaderos pulmones en beneficio de la vida en su conjunto. Generalmente estos llamados de atención no causan efectos en las decisiones tomadas por el Estado, pero estamos plenamente convencidos que si buscamos soluciones urgentes para el futuro, esta pequeña todavía población, podrá subsistir, sin el peligro eminente de la extinción. Mesas redondas y foros sobre este tema, se hace urgente y necesario, con la intención de generar una preocupación, sobre todo en los jóvenes y niños que serán los actores del futuro. Vamos entonces a conversar juntos sobre los temas que afectan a nuestra provincia y a nuestro país, obligación de gobernantes y gobernados, sin la elaboración de carpetas políticas que casi siempre reflejan posturas injustificadas de discusiones que retrasan las fórmulas de solución del futuro.