La concesión del aeropuerto, que se realizó hace dos años, "tubo un tiempo corto" para la presentación de ofertas, lo que "forzó la adjudicación al consorcio liderado por la Canadian Commercial Corporation", dijo Larrea. El director de la Comisión Anticorrupción agregó que no pudo establecer un análisis de la actividad económica de la concesión del aeropuerto porque no contó con la suficiente información sobre el proyecto. "No ha sido remitida a la Comisión Anticorrupción (alguna información) o ha llegado fragmentada, insuficiente y en idioma inglés y sin firma de responsabilidad, lo que constituye un indicio claro de falta de transparencia en el proceso", añadió Larrea. Según el director de la Comisión, el corto tiempo que hubo para la oferta hizo que se quebrante "el principio de la libre competencia, a través del cual el Estado perdió la posibilidad de optar por la alternativa que más favorezca a sus intereses". Larrea aseguró además que "el proyecto no cuenta con licencia ambiental" para construir una plataforma en la zona de Tababela, a 24 kilómetros al este de Quito, donde se construye actualmente el nuevo aeropuerto. El 22 de junio de 2005 el ex presidente Alfredo Palacio, el alcalde del Ayuntamiento de Quito, Paco Moncayo, y el embajador de Canadá en este país, Brian Oak, firmaron los contratos para la construcción del aeropuerto, que debe concluir el 10 de agosto de 2009. La inversión prevista para el nuevo aeropuerto de Quito y la zona franca aledaña a sus instalaciones es de 400 millones de dólares, que serán aportados por empresas canadienses, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Eximbank, de los Estados Unidos. La resolución de la Comisión Anticorrupción se da en momentos en que el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, ha criticado las concesiones de los aeropuertos de Quito y Guayaquil, a las que considera "verdaderos atracos".