Cuatro pescadores estaban en plena faena en la lancha “San Francisco”, del comerciante de pescado Néstor Arcentales, cuando una embarcación de fibra de vidrio se les acercó en la que estaban cuatro hombres encapuchados. Inmediatamente los delincuentes apuntaron con sus armas a los pescadores y les pidieron que se acostaran sobre el suelo, boca arriba. Después les quitaron todo lo que pudierón. Las pérdidas ascienden a más de 3 mil dólares porque los piratas se llevaron un motor fuera de borda Yamaha No. 75, baterías, implementos de faena, 40 piezas de corvina, teléfonos celulares, radio y otros. Los dejan a la deriva Después de cometido el asalto, los pescadores quedaron a la deriva y fueron rescatados por otra embarcación que estaba en faena. Néstor Arcentales indicó que no es la primera vez que le roban. “En los últimos 5 años se me han llevado (los piratas) 6 motores fuera de borda y han amenazado de muerte a los tripulantes”, recordó. Arcentales no denunció el caso en la Capitanía del Puerto de Manta ni en la Fiscalía porque, según él, las autoridades navales no hacen nada por capturar a los delincuentes. Por su parte el capitán del Puerto, Pablo Tascón, a las 09h00 de ayer, desconocía el incidente. Por vía telefónica aseguró que la lancha San Francisco no tiene los documentos en regla. En la Capitanía del Puerto sólo constan dos denuncias de robos en altamar ocurridos en los últimos 5 meses. Los pescadores de Jaramijó aseguran que en más de 8 ocasiones los piratas han asaltado a los artesanales. Afirmaron que en noviembre y diciembre suelen aumentar los robos en alta mar.