De acuerdo a la información entregada a la Policía, la señora se encontraba lavando ropa en la parte baja del domicilio y cuando subió a su habitación, ubicada en la tercera planta del inmueble, se percató que la puerta había sido violentada. Al entrar se encontró con la novedad que delincuentes habían ingresado al cuarto y se sustrajeron la cantidad de 5 mil dólares en efectivo, tres alhajas de oro, un reloj, un revólver calibre 38 y tres anillos. Los investigadores de la Policía realizaron una inspección en el lugar de los hechos. Ingresaron a la primera planta, donde hay unas gradas que conducen a la segunda y tercera planta, donde está un pequeño cuarto cuya puerta de acceso es de metal. La puerta se encontraba violentada y al entrar a la habitación los policías notaron que estaba en un total desorden. Cerca de la puerta se encontró un cincel grande, oxidado y sin mango de madera, herramienta posiblemente utilizada en el robo. Se presume que los antisociales huyeron por una puerta que hay en la segunda planta, la que se encontraba abierta y que da hacia un terreno baldío.