Kimi Matias Raikkonen nació el 17 de octubre de 1979 en la localidad finlandesa de Espoo. A los 10 años se inició en el automovilismo a través del ‘karting’, y se proclamó subcampeón en 1999 del Europa Fórmula Súper. Después compitió en la Fórmula Ford Euro Cup y a los 20 años se proclamó campeón de las ‘British Fórmula Renault Winter series’. En el 2000 participó en la Fórmula Renault, donde ganó 13 de 23 carreras. Ésto le abrió las puertas de la Fórmula Uno. El suizo Peter Sauber le invitó a hacer una prueba en septiembre del 2000 y su actuación le hizo convertirse en titular del equipo para el 2001. Sauber fue criticado por hacer debutar a Raikkonen tras haber pasado únicamente por la Fórmula Renault, pero en su primera carrera, el GP de Australia, el finlandés sumó un punto, fue sexto, y acalló a sus críticos. Después, el finlandés confesó que estuvo durmiendo hasta 20 minutos antes de su primera carrera. Esa tranquilidad, incluso en momentos de máxima tensión, le valió el apodo de ‘Iceman’ (‘Hombre de hielo’), una palabra que hoy en día lleva grabada en su casco. Su primera temporada en la F1 Raikkonen llevó al equipo Sauber a su mejor resultado en el Mundial de Constructores (cuarto puesto final). Su brillante actuación no pasó inadvertida. Así, Ron Dennis (McLaren Mercedes) lo contrató en el 2002. En el 2003 obtuvo su primer título en el GP de Malasia tras arrancar desde el séptimo puesto, éste fue su único triunfo de la temporada. Los McLaren-Mercedes no evolucionaron lo suficiente, lo que hizo que Raikkonen tuviera que conformarse con el primero de sus dos subcampeonatos mundiales. En el 2004 toda la prensa especializada lo apuntó como el principal aspirante al título. Pero Raikkonen acabó en el séptimo puesto. Sólo pudo sumar una victoria, en Bélgica. En el 2005 quedó subcampeón por segunda vez. Continúo en McLaren en el 2006, pero la temporada volvió a ser muy dura por culpa de la mecánica. El equipo no ganó ese año carrera alguna. En el 2007 Raikkonen se convierte en el sustituto de Michael Schumacher en Ferrari. Y aunque llegó a la última carrera con siete puntos menos que el líder, fue el triunfador de uno de los años más complicados y convulsos de la historia de la Fórmula Uno. El futuro de Alonso sigue en el aire El equipo en el que el español Fernando Alonso competirá el año que viene en el Campeonato del Mundo de Fórmula Uno sigue estando en el aire. Sin embargo, las opciones más realistas pasan por permanecer en su actual equipo, McLaren-Mercedes, con el que tiene dos años más de contrato, o regresar a Renault, cuyos responsables no han ocultado su interés por recuperar al piloto. La tensa relación que Fernando Alonso mantiene con su equipo y, sobre todo, con su jefe, el británico Ron Dennis, ha lanzado insistentes rumores sobre la inminente marcha del español. El equipo ha insistido hasta la saciedad que no iba a hablar de contratos hasta que acabara la temporada. El hipotético paso de Alonso a Ferrari quedó liquidado cuando el francés Jean Todt, jefe de Ferrari, dijo que mientras él esté en la ‘Scuderia’ Alonso no se vestiría de rojo. La prolongación del contrato de Massa dio carpetazo a dicha opción. Renault, a través del italiano Flavio Briatore, anhela un regreso de Alonso, pero la exigencia de la casa francesa es que el español firme un contrato de al menos tres años, ya que quiere afrontar un nuevo proyecto sólido apoyado en el mejor piloto de la parrilla.