Cuidado con lo que llevas a tu casa Por: PADRE LUIS GONZAGA
Lunes 09 Diciembre 2019 | 11:00
Lunes 09 Diciembre 2019 | 11:00
Hace poco un primo me comentaba de sucesos paranormales que sucedían en su casa. Al principio hubo algunos ruidos pero luego una hija de ellos les contó que había una “presencia” que no la dejaba en paz en ningún lado.
La experiencia le va enseñando a uno que a veces se trata de sensaciones o momentos de estrés o problemas familiares que llevan a eso. En un momento de oración que se tuvo, se preguntó a la familia si no tenía huesos de muertos o tierra de cementerio. La pareja se miró nerviosa y luego dijo que sí, que habían traído algo “para que cuidara la casa”. En nuestro medio esta práctica es común, pero no es cristiana.
Por fe creemos que luego de la muerte viene el juicio y luego el cielo o el infierno. Entonces, ¿quién cuida la casa si no es el difunto? San Pedro dice que “El diablo, como león rugiente, anda buscando a quién devorar”, llevar osamentas o tierra de cementerio es una manera de abrirle la puerta al maligno, que se disfraza de algo bueno y querido como un familiar. Dejemos cada cosa en su lugar. Estamos avisados.