Endeudado el fisco con préstamos extranjeros para obras con sobreprecios increíbles, con la intervención de compañías extranjeras de asaltantes, como se ha expresado de Odebrechet, se robaron todo y esas obras abandonadas nos sumergen en una deuda que es un latrocinio que lo sufren las entidades nacionales como el IESS, y se expresa que esos fondos son casi irrecuperables.

Hoy, al haber tomado medidas como eliminar puestos de trabajos en el fisco, llenados irresponsablemente con un “piponazgo” en el régimen ya citado, que termina colapsando económicamente y entonces miles de padres de familia se quedan sin trabajo y sueldos, y por añadiduras se culpa de ello al actual régimen. No es justo, pero eso es la percepción.

Hay que tomar medidas que aclaren las cosas, a la vez que reunirse todos los entes administrativos del país, desde la Junta Parroquial, los cantones con sus alcaldes, los Consejos Provinciales con sus respectivos prefectos, y lógicamente todos los entes del poder gubernamental integrando a ministros y más elementos del Gobierno, para unidos y enterados de la real disponibilidad nacional se programe la inversión pública de manera eficaz, legal y prioritaria, en salud, educación y de las reales necesidades de la inversión nacional, priorizada, y se evite tal requerimiento que aunque sea justo, hay otro que debe ser primero.

No hay Estado que pueda abarcarlo todo, la unión tiene que dar el toque de lo que vaya haciéndose primero con honradez y realismo, todos tienen derecho a recibir señalando una ruta de prioridades con justicia y posibilidades socio económicas. Nadie puede sentirse preterido en la factibilidad de cumplir y avanzar con orden y recursos que se administren honorablemente. La unión crea la fuerza y el derecho.