En medio de un confuso episodio que implicó agresiones de manifestantes a periodistas, se provocaron fuegos sobre la vereda y en contenedores cercanos, lo cual precipitó la intervención policial.

La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas informó de agresiones a un cronista y dos camarógrafos, uno de los cuales fue hospitalizado.

A los pocos minutos desde que se encendieran los fuegos -algunos apagados por los propios manifestantes-, llegaron grupos de contención de la Policía de la Ciudad, que dispersaron la protesta y más adelante los bomberos se encargaron de apagar los focos.

Tras la manifestación, que se saldó con nueve arrestados, la Policía trabaja para localizar a otros responsables de las agresiones que fueron tomados por las cámaras de video vigilancia.

"Eligen la violencia como camino, y ese sendero es peligroso e incontrolable. Estamos decididos a seguir defendiendo la paz y la tranquilidad de nuestra sociedad, y nosotros actuaremos con todo el peso de la ley contra quienes quieran generar caos", manifestó en su Twitter la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich.

La manifestación había sido convocada por residentes chilenos en Argentina y por organizaciones sociales en repudio al Gobierno del presidente de Chile, Sebastián Piñera, después de que la subida de precios en el metro de Santiago prendiera unas protestas que hasta ahora han dejado once muertos y numerosos heridos.

Los manifestantes pidieron la renuncia de Piñera y algunos carteles le tildaron de "asesino", mientras que otros pedían "solidaridad con el pueblo chileno", que hoy afronta la tercera jornada de toque de queda en la capital y su área metropolitana.

"Se dicen muchas cosas de un crecimiento estable en el país, pero ese crecimiento no se ve reflejado en las familias más pobres y en las familias que más les cuesta llevar a fin de mes. Por supuesto que esas riquezas se la llevan unos pocos y esta situación social de caos que está viviendo Chile refleja ese descontento", expresó Luz Cartagena, una de las chilenas que asistieron al acto.

Cartagena, que exhibió un cartel con el lema "estamos lejos, pero no ajenos", aseguró que hay problemas de fondo "graves" por resolver relacionados con la calidad de vida de la población.

Piñera declaró ayer que el país está librando "una guerra" contra los violentos, y mantiene en estado de emergencia a 10 de las 16 regiones del territorio totalmente o en algunas de sus comunas.

"Si él considera que esto es una guerra, entonces está viendo como contrario a su propio pueblo, entonces significa que está en guerra contra su pueblo, porque el pueblo está unido y están luchando por una misma causa", comentó Cartagena, que reside en Argentina hace más de seis años.

Otra de las asistentes a la manifestación fue Valentina López, natural de Santiago de Chile, quien utilizó maquillaje para simular un impacto de bala en su frente en protesta por los once muertos en su país natal.

"La situación real es que la gente vive endeudada, no puede pagar nada de las cosas: la educación, la salud, pensión... Todo pertenece a las empresas privadas. Tengo una tía que recién a sus más de cuarenta años terminó de pagar la universidad, eso no puede ser", relató López.

Sobre los saqueos e incendios que se produjeron los últimos días en Chile, Cartagena pidió poner el foco en el problema social.

"Hay gente que se aprovecha para hacer saqueos y para hacer destrucción y generar caos, pero lo cierto es que eso no es el problema de fondo. Si vamos a centrarnos en los saqueos y en los problemas de destrucción de la ciudad, entonces no estamos viendo por qué está pasando todo", concluyó. EFE