Sin embargo, el volante, actualmente en el Basaksehir Estambul, no tendrá que ingresar a las rejas, a no ser que cometa otro delito en los próximos cinco años, al haber renunciado a apelar la sentencia.

El hecho ocurrió en octubre del 2018 en una discoteca, donde Turán coqueteó con la novia de Berkan Sahin, un famoso cantante de Turquía. Se intercambiaron palabras y comenzó el problema. El futbolista en ese momento golpeó al novio de la chica y éste fue a parar al hospital. 

 

 Fue a buscarlo. Pero Turán no se quedó quieto, ya que fue hasta el lugar a pedir disculpas, pero no fue aceptado, por lo que disparó un arma contra el piso. Nadie salió herido. Tras casi un año con las investigaciones, dieron como resultado la condena.  

El tribunal absolvió a Turán del delito de acoso, pero lo condenó por el de lesiones intencionadas, al haber roto la nariz al cantante; por tenencia ilícita de armas, y por haber disparado al suelo la pistola en el hospital al que había acudido Sahin tras la pelea. 

Durante el juicio el futbolista negó el acoso, pero reconoció los demás hechos, si bien asegura que el disparo fue accidental. “Gracias a Dios, la Justicia turca ha considerado que era una vergonzosa difamación”, expresó Turán. El delantero turco, cedido desde enero del 2018 por el Barça al Basaksehir de la Superliga turca, ha denunciado también a Sahin por “difamación”.