Y es que los habitantes lamentan no poder resaltar nada positivo de la ciudadela pues, para ellos, todo es malo. 

Tienen una larga lista de problemas, entre ellos destacan la pésima condición en la que está casi el 100 por ciento de sus calles, la falta de alcantarillado pluvial, y lo colapsado que está el sistema de aguas residuales.

En la Municipal la situación empeora en época de invierno, pues todo el sector se inunda, asegura Yesica Espinoza.  

“Como aquí no hay alcantarillado pluvial todos nos inundamos, incluso hay vecinos que abandonan sus casas cuando el invierno es muy intenso, ya que toda la zona se llena de agua. Se supone que ya está aprobado el proyecto para el alcantarillado de la zona norte y aún no vemos nada”, dijo.

Belfort Moreira, también habitante del sector, coincide en que la mayor necesidad es la construcción del sistema de alcantarillado de aguas lluvias.

“A falta de este servicio hay vecinos que cuando llueve destapan las alcantarillas de aguas servidas para  que desfoguen las de lluvia, sin entender que hacen un daño, ya que éstas se rebosan porque ya cumplieron su vida útil”, mencionó.

 Más problemas.  En esta ciudadela no rescatan nada, dicen, pues según ellos, las cosas malas les ganan a las buenas.

“Aquí lo único mejorcito que tenemos es un parque que se hizo por gestión del presidente barrial. No tenemos ni un área recreativa como para que los más pequeños se diviertan”, dijo la ciudadana.

Pero no sólo la falta de servicios básicos los aqueja, sino también la inseguridad que, indican, hay en el sector. 

Además de esto, terrenos baldíos se han convertido en espacios insalubres, pues están llenos de maleza, basura e incluso animales muertos.

Esto, mencionaron, también contribuye a la proliferación de mosquitos. 

El malestar en este sector de la ciudad es evidente, los moradores se quejan de lo para ellos es una falta de atención y compromiso.

“Aquí todos pagamos los impuestos, y pedimos lo que merecemos”, señaló Francisco Espinosa, habitante del sector.