“A las 07h07, hora local, (10h00 GMT) se produjo el colapso del Sistema Argentino de Interconexión (SADI), que generó un corte masivo de energía eléctrica en todo el país y que afectó también a Uruguay”, expresó la Secretaría de Energía del Gobierno de Mauricio Macri.

Si bien se especificó que se trató de un “colapso” del Sistema Argentino de Interconexión (SADI) lo que produjo el “corte masivo de energía eléctrica” en todo Argentina, y que afectó también a Uruguay y a parte de Paraguay, se desconocen las causas exactas que lo desencadenaron.

No fue hasta cuatro horas después que las empresas distribuidoras del servicio eléctrico informaron que el suministro comenzaba a normalizarse “lentamente” en el país, donde viven en torno a 40 millones de personas.

El corte afectó principalmente a la capital y al resto de provincias del país, entre ellas, las que se celebraban elecciones locales, como Santa Fe, San Luis, Formosa y Tierra de Fuego. En varios recintos hubo atrasos por la falta de la energía eléctrica.

Además, el apagón dejó a miles de personas sin agua de red, y Aysa, la empresa pública que suministra el servicio en Buenos Aires y su cinturón urbano, alertó de que sus sistemas de bombas estaban sin energía y pidió a sus clientes que “hicieran un uso racional del suministro”.

Asimismo, los servicios de transporte urbano de trenes y metro quedaron interrumpidos en Buenos Aires por la falta de señalización electrónica.

Mientras, los aeropuertos de Aeroparque y Ezeiza, los más importantes del país, funcionaban sin grandes problemas con generadores propios.

 

“Contagio”.  En un principio se informó que Brasil y Chile también se habían visto afectados, aunque posteriormente autoridades de esos países lo descartaron.

En Uruguay, la Administración Nacional de Usinas y Transmisiones Eléctricas confirmó que un desperfecto en la red argentina afectó el sistema interconectado, dejando sin servicio todo el territorio nacional, al igual que varias provincias de Paraguay”.