Ramón Chica habita en el lugar hace más de 20 años y manifestó que espera no morirse sin ver un foco encendido en su casa, así como una refrigeradora, televisor, grabadora y demás.

Comentó que la falta de energía eléctrica se da pese a que no están lejos de la zona urbana del cantón. “Nosotros en menos de 15 minutos salimos a una vía asfaltada y en otros 15 ya estamos en el centro del cantón”, dijo.

Arturo Giler, entristecido y enojado, lamentó la situación en la que viven e indicó que él tuvo que comprar un motor para generar su propia energía. “Aquí hay hasta señal de teléfono, pero no tenemos energía eléctrica. Cuando salimos al centro es que pedimos a los amigos que nos den luz para cargarles la batería”, añadió.

 

Pedido. Comentó que en más de una ocasión han solicitado a las autoridades municipales que les provean del servicio, pero esto no ha sido posible. 

Edison Mendoza, concejal rural; y Bolívar Pin, dirigente comunitario; indicaron que las autoridades solicitarán el servicio eléctrico proveniente de Santo Domingo.