El movimiento telúrico tuvo su epicentro dentro de la reserva nacional Pacaya Samiria, en Loreto, una zona poco poblada de la Amazonía peruana, y también se sintió en Colombia y parte de Brasil.

Manabí. En Manabí, el sismo se sintió en toda la provincia. Algunas ciudades reportaron novedades.

En Calceta (Bolívar) Diana Solórzano  expresó: “Gracias a Dios me encontraba despierta porque tenía pocos minutos que había llegado de una fiesta. En ese momento, al ver que el movimiento telúrico no paraba, corrí al cuarto de mis hijos, pensé que volveríamos a vivir la tragedia del 16A”.

En Portoviejo, vídeos difundidos por las redes sociales dieron cuenta de que muchas familias salieron a las calles como medida de previsión.

En Chone, Navijio Vera comentó que se había levantado al baño, y cuando regresó a acostarse sintió que la cama se movía. Pensó que era él, pero se dio cuenta de que se trataba de un temblor.  Llamó a su esposa e hijas y decidió salir a la calle. 

Daños.  En el país, también, se registraron casas afectadas, informó el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias en un comunicado.

En Loja, se cayó parte de la fachada de la iglesia Nambacola, en Gonzanamá.

El sismo fue sentido en todo el país, pero con mayor fuerza en Napo, Orellana, Pastaza, Loja y Zamora Chinchipe.

Riesgos informó que se activaron los COE provinciales en Loja, El Oro y Zamora Chinchipe.

Alexandra Ocles, directora del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias, señaló que el COE de Zamora realizó un recorrido en el cantón Yantzaza.

En Perú. Al menos una persona murió y otras cinco resultaron heridas por el terremoto, según informó el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN).

La víctima murió a causa del desprendimiento de una roca en la región de Cajamarca, en el norte de los Andes.

La mayoría de los heridos se encuentra en la ciudad de Yurimaguas, la más cercana al epicentro del terremoto, a donde a primera hora llegó el presidente, Martín Vizcarra, para evaluar los daños.

El balance de daños también contempla 51 familias damnificadas y otras 36 afectadas por daños de menor consideración.

El sismo se produjo por el deslizamiento de la Placa de Nazca central por debajo del continente sudamericano; el ángulo de inclinación de esta plaza ya no es de 10º sino de 30º, lo cual pone en riesgo al norte de Perú y el sur de Ecuador.