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Sucre
Una cancha que une a los vecinos 
Una cancha que une a los vecinos
“Aunque el árbitro sea un burro hay que respetarlo”, es una de las reglas en la cancha de ecuavoley de la ciudadela Mangle 2000.
Lunes 20 Mayo 2019 | 11:00
A este lugar, ubicado en la parroquia Leonidas Plaza de Bahía de Caráquez, acuden decenas de hombres y mujeres durante toda la semana para disfrutar de este deporte, que muchos consideran como “una terapia contra el estrés”.
Luis Moncayo confirma esta teoría y dice que en estos encuentros nunca falta el buen humor.
William Zambrano acude todas las tardes hasta el lugar para entretenerse. Explica que en la ciudadela hay dos canchas, una para que jueguen los adultos y otra para los juveniles.
Cuando los equipos han sido definidos, empiezan los juegos. Hay quienes apuestan desde $5 por partido.
Carlos Meneses, conocido cariñosamente como “El Papa”, es uno de los árbitros que pone orden en los encuentros.
Por lo general los partidos inician a las 16h00 y culminan a las 18h00, en este lapso de tiempo se pueden desarrollar hasta seis encuentros.
Acuden. Luis Gilces tiene 61 años de edad y asegura que todos los días visita el lugar.
Explica que le gusta hacer de ‘volador’ en la cancha y aunque ya no juega como antes, considera que su nivel es intermedio en los encuentros deportivos.
Entre risas y bromas la cancha de “vóley” de la ciudadela Mangle 2000 se ha convertido a lo largo del tiempo en un centro de diversión, donde las personas se distraen.
En los alrededores de la cancha se han instalado pequeños puestos que se dedican a la venta bocadillos, mismos que son consumidos con mayor frecuencia por los visitantes, según los comerciantes.
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