Los jubilados estamos opuestos a las propuestas del Gobierno nacional y seccional, al aumentar a 75 años la jubilación que estaba fijada a los 65, no la cumplieron y aprobaron a los 74 años. No aplicaron la técnica, las pensiones decimotercera y decimocuarta están financiadas. Entonces: no al incremento de aportes a las pensiones o al aumento de años de aportación. La vejez de la tercera edad sería la más dura de las dictaduras, y nos llegó lentamente, porque lo están haciendo para dejar quebrada la seguridad social.

La Asociación de Afiliados Jubilados y Pensionistas del IESS entregó las propuestas al presidente Lenín Moreno, quien gana triple sueldo con la jubilación, para ser tratado este errado caso con el entendimiento legal, pues se pretende desintegrar a la familia ecuatoriana jubilada por vejez. Se debería someter al IESS a una reestructuración, no aumentar los años por la deuda al IESS del gobierno socialista, que no debe ser fruto de un acuerdo. Mientras, el señor de los milagros, el ex mandatario Correa, gozó de la bonanza petrolera, la más alta que tuvo Ecuador, despilfarró miles de millones de dólares, y prófugo de la justicia, pretende ser asambleísta en elecciones del 2021.

La Confederación Nacional de Jubilados, los servidores públicos y el Seguro Social Campesino piden cambios con una nueva Ley de Seguridad Social que los proteja, porque son los que nos dan el sustento diario para sobrevivir. El IESS tiene que ser representado por afiliados, jubilados, y que se transforme al Biess en banca de primer piso y hacer un inventario de bienes.

Por otro lado, el presidente Lenín Moreno debe ser destituido, al no respetar las  leyes y la Constitución, protegiendo a delincuentes amparados por leyes del Gobierno de Correa. Ricardo Patiño Aroca, excanciller del régimen de Rafael Correa y Lenín Moreno, huyó para no rendir cuentas de sus fechorías así como Rafael Correa, facilitándoles la salida del país. 

Así tengamos un proceso de formación académica aplicando el mejor desarrollo social y humano del mundo, no garantiza que tengamos una mejor vida. La corrupción está en todas partes; la sociedad civil requiere que los negocios públicos y privados sean mejorados con profesionales y gobernantes que estén preparados para administrar los poderes del Estado, donde la justicia y la dignidad de los humanos sea respetada. Por qué a la tercera edad se le marginan los derechos irrenunciables. Los cuales, si no son respetados por los gobernantes y autoridades de turno, deberán ser denunciados ante la Corte Internacional de La Haya. ¿Será delito decir la verdad?