Las autoridades detuvieron a dos hombres, de 28 y 33 años, que hacían escala desde Johannesburgo (Sudáfrica) hacia Ciudad Ho Chi Minh (Vietnam), reveló el Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, que especificó que las 24 piezas fueron detectadas en el interior de dos cajas de cartón en el Aeropuerto Internacional de Hong Kong.

Esta ha sido la última incautación de las autoridades de la excolonia británica, que tratan de hacer frente al creciente volumen de especies en peligro de extinción con las que se trafica a través de su territorio.

El hallazgo se llevó a cabo menos de un mes después de que las aduanas descubrieran una operación masiva de contrabando desde África, incautando una cantidad récord de escamas de pangolín, junto con más de 1.000 colmillos de marfil.

Entre 2013 y los primeros 10 meses de 2018, el Departamento de Agricultura, Pesca y Conservación se incautó de un total de unos 202 kilogramos de cuernos de rinoceronte, de los cuales 76 piezas eran cuernos enteros, según el Secretario de Medio Ambiente, Wong Kam-sing.

El cuerno de rinoceronte se utiliza en la medicina tradicional china, ya que afirman que tiene beneficios medicinales que van desde aumentar la virilidad hasta curar el cáncer, a pesar de que no existe evidencia científica que respalde estas afirmaciones.

La importación y posesión de cuernos de rinoceronte está prohibida en Hong Kong, excepto cuando el importador o propietario puede presentar un certificado oficial que pruebe que los cuernos fueron adquiridos antes del 1 de julio de 1975, cuando la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) comenzó a regular dicho comercio.

Las penas máximas por contrabando y comercio ilegal de especies amenazadas en Hong Kong fueron incrementadas en mayo de 2018 hasta un máximo de 10 millones de dólares de Hong Kong (1,3 millones de dólares, 1,1 millones de euros) de multa y 10 años de prisión, cuando entró en vigor la última enmienda de la normativa pertinente.

Todas las especies de rinocerontes están incluidas en el Apéndice 1 de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas, lo que significa que su comercio está prohibido.

Existen menos de 29.000 rinocerontes vivos en estado salvaje y en cautiverio, según cálculos de organizaciones ambientalistas. EFE