Actualizado hace: 937 días 11 horas 49 minutos
Salud.
Menos dengue, zika y chikungunya

Los casos de enfermedades vectoriales han disminuido, según las autoridades.

Domingo 13 Enero 2019 | 12:00

Llega la temporada preferida para los moscos: el invierno. Por eso las autoridades de salud trabajan en un plan de prevención.

Melba Morales, epidemióloga del Ministerio de Salud, indicó que año a año realizan un plan de contingencia para reducir el riesgo de propagación de enfermedades vectoriales. 

Según comentó, se basan en cinco componentes básicos: fortalecimiento de los servicios de salud, vigilancia epidemiológica, promoción de la salud, riesgos y manejo de albergues. 
Agregó que durante todo el año se realizan controles, sin embargo, los intensifican en la temporada invernal. 
Es así que en el invierno del 2018, en la zona visitaron 985.190 casas, donde colocaron abate en 2 millones de recipientes, además destruyeron 1’875.870 depósitos y hubo 241.301 casas fumigadas. 
Morales explicó que normalmente tienen 352 personas realizando los controles vectoriales y en épocas invernales llegan a unas 700. 
Incluso, dijo, tienen ayuda de las Fuerzas Armadas. 
Disminución. Las cifras en Manabí y Santo Domingo han tenido una considerable disminución en los casos de enfermedades vectoriales. 
Por ejemplo, en el 2015 se registraron 14 mil casos de dengue, siendo el año más crítico de la enfermedad. Ya para el 2016 hubo 5.965; en el 2017 fueron 4.842, en el 2018 se registraron 979 y en este año, por ahora, 40 casos, dijo Morales.
En cuanto al zika, que tuvo su aparecimiento en Manabí en el 2016, reportó en dicho año 2.567 casos. 
En el 2017 se tuvo 952 afectados, en el 2018 sólo tres, y en lo que va de este año ninguno.
En cuanto al chikungunya, el año más crítico fue en el 2015, con 11.687 casos. En el 2016 bajaron a 461 y en el 2017 se registraron 25. 
En el 2018 no se reportaron enfermos con esta patología y este año tampoco. 
Para Morales, la disminución en los casos se debe a que existe mayor respuesta ciudadana, pues se preocupan en hacer mingas y limpieza en sus sectores. 
Sin embargo, hay sitios en que por más que limpien, los focos infecciosos se crean. 
En la zona de El Rosal existe una alcantarilla con agua empozada, la misma que sirve de criadero para mosquitos. 
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