Gustavo García, director de Producción y Control de Obras del Servicio de Contratación de Obras (Secob) zona 4, dijo que esperan concluir las obras del mar antes de que finalice el año, es decir, el espigón y el contradique de la facilidad pesquera.

García explicó que la profundidad que tiene la zona de fondeo es de 2,5 metros en la orilla, mientras que la parte más profunda tiene ocho metros.

Agregó que luego iniciarán  la infraestructura, donde habrá un taller para reparar embarcaciones de fibra, áreas administrativas y de procesamiento donde se realizará el control y la comercialización de la pesca.

Cuestionan. A varios pescadores de Los Arenales no les convence mucho la obra, por su profundidad.

Salusto Castillo, pescador de este sector, dijo que el muelle se podría sedimentar, es decir, que la zona de fondeo se quede sin agua, se llene de arena y las embarcaciones queden varadas.

“Nosotros tenemos lancha y ya hemos entrado. Cuando la marea está baja se queda seco, con unos tres metros de profundidad”, comentó.

Félix Palacios es un pescador con años de experiencia. Tiene 93 años y considera que la construcción de la facilidad pesquera debió hacerse en un área donde el mar tenga más profundidad. En la vía a La Boca, en cambio, propietarios de terrenos dijeron que el mar estaría ganando terreno.

Ante esto, García aseguró que la obra no causa afectación dentro de la línea costera. “Lo que sí producen los espigones dentro de lo que corresponde al transporte litoral, que se llama al viaje del grano de arena, es que éste comienza a acumularse dentro del área sur. Por eso es que forman estas playas, como las que se han formado también en otros lugares”, detalló. 

Dijo que “esa es la única incidencia de este tipo de obras que se implantan”, e insistió en que no afecta el  tema de mareas.

En la zona norte, en cambio, no se presenta la acumulación de arena, manifestó.