Al grito de “¡Emergencia ya!, ¡Emergencia ya!”, decenas de agricultores del cantón Bolívar llegaron a la Gobernación para asistir a la firma del convenio de asignación no reembolsable, por un monto de 17’450.572 dólares, entre el Banco de Desarrollo del Ecuador (BDE) y el Gobierno Provincial de Manabí, para la reconstrucción del sistema de riego, afectado por el terremoto del 16 de abril del 2016. 

El proyecto fue concebido para regar 13 mil hectáreas de los cantones Bolívar, Tosagua, Junín y Chone.

Hace unas dos semanas se firmó el convenio de transferencia de fondos entre el Ministerio de Finanzas, que certificó la disposición de los recursos provenientes de la Ley de Solidaridad para la Reconstrucción, y el BDE, que administrará los recursos. El Gobierno Provincial contratará la reparación de la obra. 

Reclamos. Regis Moreira, presidente de la Asamblea Ciudadana de Bolívar, dijo que hace siete meses tomaron la batuta de la Junta Cívica de Regantes del Carrizal, para lograr que se contrate la reconstrucción del sistema. Insistió en que con la emergencia se puede contratar rápido. “Todos los días se mueren cientos, miles de plantas en el valle del río Carrizal, queremos la emergencia, hay 13 mil hectáreas afectadas”, aseguró. 

Geroncio Montesdeoca, presidente de la Organización de Regantes del Carrizal, recordó que el sistema no funciona desde el 16A, son 30 meses sin riego y si se declara la emergencia hídrica se va a contratar más rápido porque los procesos licitatorios toman su tiempo. “Son unas mil familias que solo pueden sembrar en invierno porque estas comunidades de vocación ancestral en tema agrícola en verano pasan de brazos cruzados”, enfatizó. 

Firma. El prefecto Mariano Zambrano dijo que el Gobierno Provincial de Manabí declarará la emergencia hídrica porque, como es un recurso de la Ley de Solidaridad, asignado por el Comité de Reconstrucción a la Prefectura, se debe presentar los argumentos, los justificativos al BDE. “Los campos están totalmente secos, se empieza a morir el ganado, desde hoy mismo voy a justificar para que se haga por emergencia”, señaló.

El secretario del Comité de Reconstrucción José Herrera, mencionó que “han pasado 30 meses del terremoto, correcto, pero también han pasado más de 30 meses de que el proyecto no funcionó y han pasado muchísimos meses más desde que estaba funcionando deficitariamente”. Añadió que “en este instante lo que buscamos no es una solución parche, buscamos que esos millones de dólares de la Ley de Solidaridad y la contraparte del GPM puedan ser invertidos de manera correcta”.

Sobre el tiempo transcurrido para la firma del convenio, indicó que “desgraciadamente ese es el mecanismo, no podemos hacerlo sin estudios que nos aseguren con exactitud que esos fondos van a ser extremadamente bien utilizados”.

Carlos Julio Jaramillo, gerente general del BDE, señaló que espera la solicitud del prefecto haciéndole conocer la declaratoria de emergencia. “En estados de emergencia la ley claramente estipula a quién le corresponde, en ese sentido el banco operaría con la gestión de manera inmediata y la consulta respectiva al Ministerio de Finanzas, que es el que ha transferido los recursos al BDE para que se haga efectiva la obra”, indicó.

Reparación. El director de Riego y Drenaje del GPM, Joab López, refirió que se ha denominado al proyecto fase uno porque hay posibilidades de que se requiera más fondos, que serán canalizados por el GPM o a través del Comité de Reconstrucción.

Se hará el cambio de tres puentes próximos a la presa La Esperanza que soportan el tronco común, se pintará la tubería que es de poliéster con fibra de vidrio, instalarán equipos nuevos del sistema Scada que monitorea la entrega del agua, construirán oficinas para personal de operación, mantenimiento y cobranzas.

También dijo que primero se va a desalojar la tubería sobre el cauce del río, los puentes fracturados para que si vienen las lluvias el agua pase, y así ganar tiempo y mejorar la compactación del suelo.